lunes, 14 de marzo de 2011

EL CORAZÓN DE ÁNGEL – GRAVOSA VANIDAD

Cubierta de una edicion francesa
con elementos del filme
El distinguido, atildado y untuoso LOUIS CYPHRE, valiéndose de una prestigiosa firma de abogados, contrata a HARRY ANGEL, un detective privado con pocos escrúpulos y más próximo a la ilegalidad y la inmoralidad de lo que estaría jamás dispuesto a admitir, para que localice, quince años más tarde, a un viejo protegido suyo, el cantante JOHNNY FAVORITE, que era superior a SINATRA, y cuya carrera melódica, de éxito considerable, quedó destrozada (como su cara, y mente, en apariencia) en un combate durante la Segunda Guerra Mundial, donde participó como animador de las tropas.
Angel acepta el caso, que a priori promete ser un fiasco, y que no estimula su interés demasiado (hasta que habla el vil metal y se pone las pilas). Al empezar a descamar la cada vez más misteriosa desaparición de Favorite, descubre en primer lugar que al sujeto le envuelve una estafa, y luego Angel penetra en un tortuoso vericueto de intrigas e identidades falsas que le van a demostrar que lo sobrenatural es mucho más real de lo que parece al principio: un capricho de ricos que practican magia negra en supuestos aberrantes y elitistas aquelarres por aburrimiento.
WILLIAM HJORSTBERG complacido con los
escalofrios que produce a sus lectores
Lo sobrenatural le va fagocitando conforme sus pasos se orientan en la dirección que lleva hasta Favorite, cuya leyenda negra se agiganta hasta transformarlo en una criatura espeluznante, despiadada, ávida de éxito, fortuna y reconocimiento, y que obtiene sellando un auténtico pacto con el Diablo.
Tras de sí, Favorite dejó una hija, EPIPHANY PROUDFOOT, joven y astuta sacerdotisa vudú que proporcionará al escéptico Angel terribles pruebas de que la magia negra no es ilusionismo barato. El encallecido detective privado va haciéndose “a la fe”, lo cual le colocará al fin ante un abismo que le devuelve sobrecogedoramente la mirada.
Fotograma de LEGEND, con libreto de
Hjorstberg y direccion  de RIDLEY SCOTT.
Es, tal vez, el mejor Diablo de la ficcion
La novela de WILLIAM HJORSTBERG tiene, para mi gusto, un solo defecto: le falta la garra que un JAMES ELLROY, JOSEPH GORES o DONALD WESTLAKE, escritores de novela negra, o hard boiled, le imprimen a sus párrafos. Le falta esa incisiva cuchillada. Por lo demás, es impecable. Cualesquiera que sean sus otras deficiencias son pecata minuta que no la deslucen, porque la obra humana, insisto, es falible por nuestra naturaleza; no importa cuánto y sinceramente su autor se esfuerce por hacerla perfecta: en algo fallará. Quizás en ese empeño se ofusque con otros detalles y consiga lo que evita mostrar: imperfección.
Pero, reflexionándolo, esa falta de “presión” de la novela, relatada en primera persona, a través de abundantes diálogos, concisas y claras descripciones de los personajes y el ambiente, la ubicación espacial, y cortos capítulos (que opino obedecen a la naturaleza de guionista de cine del autor, que parcela la acción que relata en las acotaciones habituales de un guión para la pantalla de plata), es la atonía que refleja la confesión de un reo que se ve finalmente superado, acorralado, y no necesita mentir más ni tratar de confundir, mediante tortuosos engaños y emocionados párrafos, a los investigadores para exculparse del crimen cometido. Bajo este prisma, pues, FALLING ANGEL crece. Estamos ante la escena que se produciría en un hipotético cuarto de interrogatorios, oyendo a un hombre derrotado que acepta la sentencia sin querer apelar a nada más que a una rápida ejecución, y cuya premura la haga así indolora.
ALAN MOORE, nigromante y guionista,
prueba a explotarle los sesos a los de
DC COMICS. De estas cosas sabe mucho
Mas la suerte de Angel/Favorite (no importa si desvelo el enigma final, ¿verdad? Me temo que este material es antiguo y está ampliamente difundido) trasciende cualquier castigo que los poderes humanos decidan aplicarle. Y es en las frases finales donde comprende qué oscuro destino le aguarda. En ese momento la rendición del detective-ex cantante culmina. Empezó en el taxi que le condujo al último escenario del crimen, donde se cierra por fin la trampa tendida hábilmente por Cyphre que, divertido por cómo su víctima se debatía, le permitió creer que aún tenía esperanzas, y era capaz de superarle en astucia, preparación e inteligencia.
Favorite/Angel cae por vanidad; la arrogancia, un considerable pecado, lo tenía del todo/completamente carcomido y fiándose de su talento natural para la brujería, urdió un escalofriante plan para poder demostrar que era más listo que el Diablo y hasta que le vencería en su propio juego y en el tablero donde estaban dispuestas las piezas.
ALEISTER CROWLEY, "maestro" de Moore. El
hombre era asi de raro y todavia mas (lo delata
su gorro)
Pero el Diablo le demostró que su reputación no es mera filfa. Por otra parte, el plan de Favorite para incumplir su compromiso con Satanás también evidencia tanto culpa como arrepentimiento, y especialmente, miedo, un pánico agudo a la eternidad de sufrimiento y brea candente que, se supone, es el Infierno (NIETZSCHE creo que dijo que tal era volver a vivir y cometer los mismos errores una vez y otra sin remedio, y siendo consciente de este hecho).
Y nos induce a cierta reflexión: la existencia del Diablo implica, por tanto, la de Dios, y ya sabemos que Dios, según la liturgia (la que sea; y el Altísimo reciba el nombre que sus acólitos le den), creó el cielo y la tierra, los animales, y se aburrió al séptimo día tras modelar al hombre y la mujer. (La Creación, según el ANTIGUO TESTAMENTO, hace sospechar limitaciones en el poder de Dios: necesita de días para hacer las cosas. ¿No es omnipotente? ¿Por qué a las ocho de la mañana del Primer Día de la Creación no puso el correspondiente conmutador en ON, y se encendió entero el Cosmos?) Yo lo entiendo así: si el Infierno existe, y no pareciendo el mejor lugar donde pasar la eternidad, ¿vas aún así a vender tu alma, nuestra única y valiosa posesión? Imagínate una eternidad (que en el Infierno se asegurarán de que sientas cada segundo, sin desperdiciar ni uno) de jalar alquitrán, mascar tizones ardiendo, pinchándote esos tenedores, respirar las ventosidades de diablos que sádicamente se ensañan contigo. Si ya es malo ir a parar allí como simple pecador: ¿cómo es que los acólitos del Diablo deseen voluntariamente “disfrutar” esa atrocidad, si no van a estar en mejor situación que los demás?
El sigul de la "editorial"
de Moore. Pues tiene
truco cabalistico
Pues por vanidad, como le asegura a Angel, tras la canallesca misa negra, ETHAN KRUSEMARK (los nombres que figuran en la novela, al menos la mayoría, poseen gran importancia, además de ambigüedad). Por unos pocos y efímeros años de esplendor. No digo que vivir como un miserable anacoreta de la Biblia sea lo suyo, pero aún menos que, tras morir, lo que te espera sea perpetuo sufrimiento y por gusto, cuando, de seguir recto pese a los torcidos caminos, el Paraíso te aguarda.
La ciudad donde se desarrolla la novela, Nueva York (helada por el invierno de 1959), es otro personaje. Grande, absorbente, apabullante, repleta de lugares emblemáticos cuya historia Angel nos refiere, y que le engulle en su mitología más ligada a los tejemanejes sinuosos de Cyphre de lo que parece. Leyendo esos fragmentos, recordaba BLADE RUNNER 2, EL LÍMITE DE LO HUMANO, donde J.K. JETTER mueve a DECKARD por Los Ángeles pero sin darnos sólidas pistas de su ubicación. Hjorstberg, de este modo, enriquece su obra, situándonos y embelesándonos con qué oscura leyenda urbana envuelve al lugar, no como el “pirotécnico” Jetter, que no tenía más intención que asfixiarnos con su salvaje dominio de la gramática.
BLACKSAD, de CANALES y GUARNIDO,
tambien bebe de esta novela lo justo

El ARCANO MAYOR de
EL AHORCADO describe
perfectamente a HARRY
ANGEL

El corazón de Angel es una de esas pequeñas joyas  digna de atesorar. Ha influido, y considerablemente, en otras obras, surtiéndolas de detalles que el sagaz lector podrá reconocer llevándose una sorpresa al descubrirlos.
Vuestro Scriptor.