domingo, 26 de diciembre de 2021

STAR TREK — SU SOTERRADO ADOCTRINAMIENTO COMUNISTA

 

De forma sin duda subconsciente,
los responsables de esta veterana
serie tan afamada estaban ayudando
a consolidar la tiranía tras el Telón
de Acero cuyos tentáculos están
oprimiendo España actualmente


Las grandes sagas, o aun personajes, nos han acostumbrado a las frases épicas lapidarias o con carga filosófica. Star Trek retumba en las de “las necesidades de muchos, o aun las de unos pocos, superan a las de uno” y: “pax y larga próspera vida”; STAR WARS se inmortaliza con las de: “La Fuerza te acompañe”, o: “Es inevitable. Es tu destino”; MAD MAX tiene las de “Sólo vine por la gasolina”, o: “¡Dos hombres entran, uno sale!”. THE TERMINATOR: “Ven conmigo si quieres vivir”, o el célebre “Volveré”. Abundan los paradigmas. Empero quedó claro el concepto, ¿verdad?

Bien. ¡Al meollo! Hace poco, leí un artículo sobre cierta político (conviene así escribirlo, pues si consignara “cierta política” entrañaría ambigüedad. Se entendería hablaría de una directriz, no de alguien; pasa igual con lo de “música”. Una mujer que se dedique a esta disciplina artística hace mal diciendo “soy música”. No: eres MÚSICO. La música es el Arte) que, con hueras grandilocuencias, aspira a convertirse en la dictator total de España. Pretende imponernos fórmulas totalitarias, entre las que despunta la anulación del individuo, mutándolo en el/la trabajador/a, figura informe, sin rasgos, integrada en una anónima amalgama de ‘iguales’ que prohíben destacar.

Fue súbito flash: apenas acabé de leer esa frase, la de Star Trek citada primero inundó mi mente. Encadenó sugestivas referencias a la ideología trekkie de su federado mundo futuro: Sociedad vegana e inclusiva, igualdad de géneros, ausencia de la propiedad, abolición del dinero (lo cual significa que el Estado controla e interviene toda economía, pública y privada, dependiendo tu bienestar de su merced), integración en un sistema cuya única motivación es crear una pancomunidad cósmica homogénea, compuesta por todos los seres vivientes/sentientes de la Galaxia… sin héroes. Una Sociedad-Colmena, donde quien dictó la ley formó la trampa para que algunos despunten so pretexto de que deben gobernar, sobrevolando todas las normas. Entre esos trekkies, como entre los comunistas, habrá unos “más iguales” que otros.

Sin embargo, quiero ver en el 
subtítulo una verdadera esperanza de
que nos libremos de un fatal yugo
que califican de "progresista";
¿dónde está su "progreso", si cada
vez nos mutilan más derechos y
libertades?

Así, la tripulación de la Enterprise está incluida en un engranaje militar de expansión y adoctrinamiento disimulado de investigación. Uno pilota, otra recibe telegramas del espacio, aquél investiga, el capitán lidera. Mas empeñan toda esa energía en crear un UNIFORMADO colectivo anónimo intergaláctico, multicultural/inclusivo-sin raíces, o sin señas de identidad, con lo cual educas un manipulable ente carente de referencias étnicas o culturales autóctonas. Un acrítico sujeto-veleta, que gira al viento que sople desde el Poder, o quien lo ostente. Especializado en el orwelliano doblepensar, además.

[Cuando pones uniformes —o etiquetas— ya no ves individuos, o personas. Sólo un colectivo del mismo color que comparte afanes.]

GENE RODDENBERRY, en algún momento (si no él, los productores), debió advertir que el futuro asimoviano medio perfilado de la serie tenía demasiadas concordancias con el comunismo. El individuo se jode porque sus problemas son purria comparados con los del colectivo (muy bonito, mientras tú no seas ese uno fastidiado). Por tanto, convirtió a JAMES TIBERIUS KIRK (quizás más manejable que la capitana que, originalmente, comandaría la Enterprise) en un individualista rebelde siempre al borde del consejo de guerra por tomar decisiones al margen del colectivo.

¿No es esa el ánima de Star Trek, cualquiera sea la saga? Para hacer su santa voluntad, uno, o varios uniformados, desobedecen la norma, situándose en Modo Consejo De Guerra, del cual escapan sin embargo bien librados, o acabó la serie.

Incluyo esta espléndida pintura
de DREW STRUZAN (¡aclamad
al ilustrador!) por alegrarnos, al
menos, la vista con su colorido

Kirk encarnaría el espíritu individualista del norteamericano (ejemplificado en el pistolero, o cowboy, por romanticismo; en lo práctico: el empresarial BILL GATES de turno) alejando las sospechas del FBI de simpatizar con la Amenaza Roja, Dictadura del Pueblo que suprime al individuo/individualista por disonante, y donde se somete y/o regula el pensamiento, la intimidad y la conducta privada del ciudadano “por su bien”.

Sin embargo, era tarde. La doctrina estaba fijada; cambiarla suponía sacrificar la esencia de la saga. Las necesidades de muchos… preámbulo del adoctrinamiento comunista de Star Trek. Comunismo que invade nuestras viviendas cómodamente, al engañar con un relato del escapista-individualista que desafía la disciplina colectivista. Por desgracia, el “los problemas de uno son nada”, etc., os delata, trekkies.

Esto explica el éxito freakie-trekkie: es un colectivo-colmena, sin personalidad, frente al más levantisco warsie (al menos, el previo a la inclusiva Trilogía Patética), que puede decantarse al Reverso Tenebroso si lo desea, y donde el sujeto cuenta. Se le considera. No como en Star Trek, donde le aglutina, absorbe, disuelve, “por su bien”.

martes, 21 de diciembre de 2021

PROSPERAS PASCUAS Y FELIZ NAVIDAD…

 

Algo de pícara sensualidad y calor
en estas fechas, que espero 
celebremos sin sustos ni tampoco
sobresaltos

…os deseo, confiando que 2022 sea mucho más venturoso, prometedor y pacífico que el expirante 2021.

Por estas fechas de 2020, las perspectivas para 2021 eran más inciertas y aciagas que las del inminente 2022, aunque en líneas generales seguimos hablando de contagios, prevenciones, precauciones y matizaciones que oscurecen un poco más ese horizonte que, en verano, decían se abriría espléndido, puerta a incontables parabienes que han acabado naufragando.

Sé que, siendo este texto el de la postal navideña, es inadecuado mencionar esos temas. Debería ceñirme al usual mensaje de concordia, pax y buenos deseos, de luminosas esperanzas a cumplir en breve. Empero estamos asediados por una opaca actualidad que, por mucho que intentemos esquivarla, sigue presionando nuestra realidad.

Por tanto, apelemos al Benéfico Espíritu de la Navidad (no sea envíe en represalia tres inquietantes fantasmas cargados de temibles visiones, como en el —ahora olvidado— clásico de CHARLES DICKENS) para que encarrile las cosas y regale un atisbo de la vital recuperación hacia mejores perspectivas que tanto necesitamos, la cual a partir de ese momento acabe consolidándose.

PD.-

[Reconozco cuán feo es hacer esta observación, pero las felicito mientras puedo, porque en 2022 igual deciden que, como durante el Régimen celebraban las Navidades, las prohíben por franquistas. Que, esto, aún podemos vivirlo, verlo, sobresaltarnos.]

viernes, 17 de diciembre de 2021

LA CONEXIÓN CÓSMICO — O EL INGENUO OPTIMISMO DE CARL SAGAN

 

Una de las tantas portadas de
este libro. Por su contexto 
científico (astronómico, aunque
no en exclusivo), no sé cuánto de
desfasado ha quedado, pese a
que lo principal es especulativo

Considero que este texto divulgativo de Sagan es borrador de lo que luego fue la serie documental COSMOS, de tanta repercusión en su momento. Procedente de 1973, aunque su redacción empezó en Década 60, procura ser compendio de los prodigiosos avances en ciencia y astronomía, astrofísica, de por entonces. La misión Mariner había alcanzado Marte con más éxito del esperado, e iba mostrando pasmosas imágenes de un planeta sobre el que sabíamos mucho por las audacias fetish de JOHN CARTER (o su potencia militar descrita por H.G. WELLS), y algunos otros escritores, empero apenas nada de la realidad de la esfera rojiza.

Sospecho que muchos de sus datos “técnicos” están, o desfasados, o corregidos. Pueden, aun así, servir de orientación para indicar por dónde empezar a buscar para actualizar o ampliar noticias. Uno de los más peculiares, referente a Marte, es que posiblemente atraviese una era glacial. De milenios de duración. Al parecer, el apunte es exacto, no mera especulación. Han ido cartografiado recientemente evidencias que lo indican.

Puede, por tanto, el siglo que viene (o a mediados de éste, pongamos fantasiosos) ver cómo manchas de verde crecen mientras el agua circula por los actuales helados desiertos del planeta rojo. Nada alentadora es la situación para Venus, sin embargo. Tórrido total.

Mas lo que más he destacado del texto es el optimismo como Sagan se refería a diversas cuestiones, como ausente de la procelosa Guerra Fría de entonces. Contemplaba una Humanidad, próxima en el tiempo, unida por el reto de la exploración del Sistema Solar, luego más allá de

(la Cúpula del Trueno)

El autor, CARL SAGAN, en una foto
un tanto de cine
noir. Sus esfuerzos
por salvarnos de la guerra nuclear no
creo hayan sido suficientemente
reconocidos

Orión, hacia Alfa Centauro, y asimismo cohesionada en la conquista de desafíos técnicos, científicos, morales, ecológicos, para conseguir ese Gran Planeta Tierra Trekkie a lo SAN ISAAC ASIMOV fundacional. Descubres cuán simpáticamente ingenuo el doctor estaba mostrándose, pese a que la guerra termonuclear podía desatarse la semana siguiente de especulado eso. Parece un desesperado deseo de fraternidad en una época de cohetes nucleares tan devastadores como armas de MODERAN.

Dos detalles más. Uno: Sagan censura las chuminadas feministas. Al parecer, criticaron que la figura femenina del disco de Pioneer 10 no mostrara sus “atributos sexuales”, considerándolo ofensivo desprecio. Sagan respondió que se trataba de enviar un mensaje, no hacer un concurso de talentos genitales. Centrémonos en lo importante.

Dos: la ecología. Ese gran GRAN tema actual (junto con el del Apagón) que tiene a tantos TANTOS fariseos brincando por doquier, fraguando lobby$ especulativo$ para enriquecer a unas pocas selectas mafias con el beneplácito de Gobiernos apoquinados, peleles, cobardes, incapaces de plantarse ante los abusos retóricos de una niñata chillona y su banda hampona para hacer como Sagan: callarla para centrarse en lo importante. Se pliegan al dominio de ese súcubo, para que les viole por el culo cuando quiera.

Su obra divulgativa más famosa... 
hace décadas. Su fuerte impacto
televisivo nos mostró una maravilla:
nuestro Universo, y la milagrosa
circunstancia de que existamos


Sagan ya alertaba sobre muchas de estas complicaciones que hoy día nos avinagran los almuerzos. Si se hubieran empezado a tomar medidas que ahora, despóticas, quieren imponernos, otra historia podríamos vivir. Mas había intere$e$ de por medio y, seamos francos, los representantes de la “conciencia ecológica” no eran los más idóneos: hippies zarrapastrosos medio drogados que no inspiraban ninguna confianza. En una época en que contaba la apariencia, no consiguieron transmitir al populux la necesidad de efectuar ciertos cambios en nuestras costumbres de consumo. Sino que eran agentes de la URSS camuflados de ahumados perezosos.

Me induce desprecio ver que esta Zoociedad oportunista, endeble, voluble, venere a una niñata chillona sin titulación ninguna, manipuladora que oculta siniestros intereses económicos personales, mientras ignora, o desprecia, a expertos armados de datos como Sagan. Frustra. La importancia de este texto, con su especulación sobre lo complicado del contacto con Civilizaciones estelares, reposa en la curiosidad científica que supone, así como que varias de sus “predicciones” siguen teniendo vigencia tantos años después.

viernes, 10 de diciembre de 2021

LOS SIETE MAGNÍFICOS DEL ESPACIO — CUTRERÍAS A MANSALVA…

 

Afiche. La película es una basura;
no es cutre aunque graciosa, como
otras. Empero, como es de naves,
había que verla... Patético

…financiadas por el inefable ROGER CORMAN, aunque el “inefable” no debe entenderse como desprecio o insulto. Tiene el hombre su mérito (su cantera dio cineastas como JAMES CAMERON) por su capaz osadía de reciclar o aprovechar recursos o útiles. Violó sin compasión los relatos de EDGAR ALLAN POE y H.P. LOVECRAFT, y si le alcanza, los de CLARK ASHTON SIMTH o aun los de ROBERT E. HOWARD. Dio plena licencia a VINCENT PRICE para que hiciera de rebuscado malo histriónico hasta decir basta.

La película imita desvergonzadamente la resonante estela de STAR WARS. Asombroso resulta que GEORGE LUCAS, quien fue implacable demandando al autor de la teleserie GALACTICA, pasara totalmente de hacer igual a esta cutrería. Porque más crimen tiene que Galactica.

Como todas las malas cintas (no sé cuánto adrede esta lo es), derrocha estupendas ideas desaprovechadas que, en manos de un director más vigoroso, valiente, inspirado, aunque fuese con su limitado presupuesto, habría legado un filme más digno, acaso de culto. Ignoro, empero, cuánto Corman interfirió en la dirección de JIMMY T. MURAKAMI. La cosa es que, de un divertimento casposo, aun bienintencionado, pasa a un pretencioso tedio que tiene, como curiosidad, que uno de los Siete Magníficos originales participe.

Ahí va ese portento de la maldad y la arrogancia.
No es que lleve la mano escayolada, sino otra cosa
más absurda. Este también ganaba un Oscar por
su actuación... por cojones.
..

Aunque, para lo que hace ROBERT VAUGHN, cualquier otro actor, más/menos conocido, habría bastado. Porque Vaughn está acartonado; suelta aspavientos de amargado sicario implacable-fatal para luego diñarla tras estrellar su nave en un páramo. Antes ha lanzado alguna chatarra al espacio, para justificar lo que fuese su nómina.

En idéntica proporción de desgana va GEORGE PEPPARD, que pienso no fingía tanto su interpretación de borracho COWBOY terrano-camionero. El actor era alcohólico, y en ciertos momentos intuyes que no actuaba de dipsómano: estaba tajado de veras. Tiene una brumosa muerte heroica para un irrelevante papel insignificante, apropiado para un intérprete ambicioso en ciernes que podría haber bordado, por eso de demostrar ganas y capacidad para ser el nuevo MARLON BRANDO, o alguien semejante.

Aparte de que esté buena, la VALKIRIA es la que
mejor parada sale de esta chufla cósmica... en la
que "el cameo" de OBI WAN BEN KENOBI no
podía faltar

Quien merece la pena (porque el tal CAYMAN parece un desecho de LA FUGA DE LOGAN, como algunos sets) es la valkiria. Personaje por entero desaprovechado. Aporta tanto el físico descarado como la combativa actitud arrogante de quien pelea por querer obtener un espectacular Valhalla. Relegada a un plano menor, su exuberancia la permite destacar aun así. Hasta diría que tenía las mejores frases en un filme donde los manidos, planos y ampulosos diálogos parecen escritos por párvulos con cierto instinto.

Y nada revelo añadiendo que esta saga de maquetas espaciales (cuyo diseño impide, a veces, saber qué nave tripula el bueno, cuál los malos) se inspira en Los Siete Magníficos (que se inspiraba, a su vez, en etc.). Así que mejor criticar la actuación, realmente sobrada, absurda y grotesca, de JOHN SAXON y su pléyade de mutados con el cráneo cosido, profiriendo las estúpidas bravatas de todos los villanos baratos de estas películas, justificándose en que agreden el planeta de tontolavas pacifistas del protagonista sosainas situado en el punto más remoto del quinto pino.

La pava suspendida es la novia del soseras del
protagonista. Los dos calvetes en primer plano
también tienen su enjundia, porque el menda de
cráneo verde también se las trae... de idiota. Ni
que fuese el Ministro (Comunista) de Consumo

Consume excesivo metraje la tonta recluta de “magníficos”, aunque admito que los dos enanos calvetes térmicos tienen su punto, y qué cómicos son los clones de bianco total.

La única manera aceptable de visionar este romo “clásico” de los bodrios estelares es reuniéndote con los amigos, tomándose unas cuantas birras y luego descojonarse con sus horteradas, servidas en abundantes paletadas por Murakami, quien recicla todos los tics anticuados de la ciencia ficción de Década Cuarenta-Cincuenta sin empacho alguno, rehuyendo la modernidad que Lucas supo imprimir a LA GUERRA DE LAS GALAXIAS pese a apoyarse en la tradición artúrica, dando ostentosa nueva dimensión a las leyendas.

viernes, 3 de diciembre de 2021

LA LEGIÓN DEL ESPACIO — EL MACGUFFIN DEL AKKA

 

Que la portada de la edición de 
MARTÍNEZ ROCA haga guiños
a la
ENTERPRISE lo justifica el
modo de viajar por el espacio
de estos legionarios

No desvelo a quienes hayan leído este clásico de JACK WILLIAMSOM cuánto debe a LOS TRES MOSQUETEROS aunque en el espacio. GILES HABIBULA te infla las pelotas pese a que, al principio, sus ‘quejiqueríos’ tienen “su aquél”, le brindan un carácter que, empero, sus continuos/laboriosos lamentos acaban hastiándote. ¡Puñetero borracho!

Al contraste, los demás participantes son planos, con algunos rasgos físicos o de carácter, mas según avanza la narración descubres cuán huecos están. Parecen de cartón piedra. Sin psicología. Éste es fuerte. Aquél, estoico. JOHN ULNAR, luego John STAR, protagoniza. El de allá, traidor. A este maduro, lo flagelan los remordimientos. Pero ¿discurso interno? Mínimo-nimio, no sea que tronche algo en una evasión no tan violenta como plenamente aventurera (uno de sus aciertos), contagiada de las hedonistas andanzas de JOHN CARTER, a quien también debe recursos.

La novela recoge la transcripción que realiza un moribundo con la facultad de recordar el futuro. Su médico, simpatizando con el peculiar enfermo, se hace su albacea literario, publicando las historias del siglo XXX; relata al común de los mortales las revelaciones sobre una época sombría debido a una invasión extraterrena que amenaza con erradicar del todo/completamente a la Humanidad del Universo.

JACK WILLIAMSON dibujado;
uno de los pioneros del género que
no vacilaba en usar técnicas del
pulp para expresarse

John Carter va dejando trazas de su vida barsoomiana mediante un pariente que es quien describe sus constantes y aparatosos lances caballerescos en el moribundo planeta rojo. Un segmento significativo de esta novela transcurre en Marte, donde reside, entre los escombros de una fortificación abandonada, la encantadora ALADOREE ANTHAR, un adelanto de LEIA SKYWALKER ORGANA, pues posee un conocimiento importantísimo: el del AKKA, arma de devastación masiva que no debe caer jamás en malas manos. (Leia llevaba la información que destruiría la Estrella de la Muerte. Así… se ensamblan, digo.

Fallo: a persona en conjunto tan vital, sin embargo no la custodian como correspondería. Los Tres Mosqueteros (encima, gente más cerca de la jubilación que del vigoroso esplendor físicobélico de RAMBO) la protegen. ¿Lo suyo no habría sido alojarla en un castillo inexpugnable y todo eso? Pues, no. En la escombrera remota marciana.

Así ocurre su secuestro, dando por tanto pie a la construcción de una novela que, he leído, fue el germen de LOS GUARDIANES DE LA GALAXIA. Bueno: me cuesta verlo. Me abalancé a leerla pensando: Puede que Williamson visionara ya los personajes del TBO clásico: el tío bajito joviano; el vidrieras; el arquero azul; el mariquita volador; el capullo de VANCE ASTRO. Nada. Gente corriente-y-moliente que, encima, combate en un tenebroso planeta el triple mayor que la Tierra (¿con tres, o más, veces nuestra gravedad? Porque eso no se relata; otro fallo), respirando un veneno letal durante ¡meses!

Y lo que pienso se equivocan al
decir que este serial ilustrado se
inspira en esta novela. Salvo por
el número de protagonistas, no
hay más parecido
Los defectos de La Legión del Espacio (idea que ROBERT A. HEINLEIN perfecciona en TROPAS DEL ESPACIO) solapan sus aciertos. Primero: no tiene elevadas pretensiones moralistas, en plan FUNDACIÓN. Acierta, ya en 1947, al afirmar que Plutón tiene una luna (cosa descubierta más adelante), así como que el planeta en torno a una enana roja tiene su vegetación negra, o de matices muy oscuros. Para atrapar el calor. ¿Qué falla?

No hay robots en tan avanzada época de viajes supraluz. Un mundo que orbita una enana roja no rota sobre su eje. Si destruyes nuestra Luna, arrasas la Tierra. El final de la novela es súbito Deux Ex Machina, procurando cerrarla con el happy end que corone el idilio entre John Star y Aladoree. Las defensas terranas no pueden caer con la facilidad como Williamson describe, pese al poderío mecánico-metálico del invasor, LOS MEDUSAS. Y estos son varios de sus defectos principales. 

Mas, en resumen: La Legión del Espacio es novela simpática estropeada por un secundario quejica, envuelta del pulp más refinado, aunque carente de sus superhombres. Salen abnegados demócratas que cruzan nuestro Sistema Solar como quien va al mercado. Oh, ¡esa ingenua fantasía del pasado…!