domingo, 31 de diciembre de 2017

ADIÓS, 2017 — HOLA, 2018

De lo más positivo de 2017: la ampliación
de aventuras de nuestra espectacular y
simpática BIANCA BLAZE
La rápida recapitulación del año que en unas horas fenece, atendiendo a parámetros de honestidad, arroja desigual balance. Empezó prometedor aunque luego, en Mayo, empezó a estancarse. El verano, y más en una tórrida ciudad como ésta, no podía sino rematar la faena. Debería ocultar este detalle para hablar de gloriosos embustes, mostrar un oropel deslumbrante de conquistas, triunfos, exposiciones, entrevistas... Pero las mentiras tienen las patas cortas. Y el bochorno que luego sufres, cuando te afean el detalle, no merece el disgusto.

En algunos aspectos, 2017 ha sido fantabuloso, y al parecer, para 2018 se avecina un cambio. Que amenaza con ser, nada menos, que a mejor. Ciertas mareas están moviéndose y agitando sargazos detenidos desde hace tiempo en una dirección en este momento, incierto. Pero otros indicios predicen una oportunidad excelente que no puedo para nada desperdiciar.

No es momento empero para hablar de esa cosa larvaria, mínima-nimia. Sino de desear que el año entrante nos resulte espectacular; ése en que TODO se cumple de la manera más favorable, tanto para nosotros como para nuestros intereses.

Como ocurriera en Navidad, expreso un deseo de moderación y alegría para la festividad en ciernes a celebrar, y una programación televisiva decente. Hasta 2018. Seguimos leyéndonos, ¿conforme?

jueves, 28 de diciembre de 2017

¡NOTIFLASH! HBO DESEA ADAPTAR “ROAD TO SOGUETTO” — ¡HEY HEY!

Junto a otras provocadoras producciones como ROMA,
HBO quiere ampliar su propuesta con esta contribución 

mía a la literatura catastrofista
¡Rompo mis vacaciones navideñas para comunicaros esta reciente sorpresa! Yo mismo sigo alucinado. De momento, puedo confirmar estamos cerrando fechas para iniciar las negociaciones (presumiblemente, para después de Reyes Magos) de la adaptación a la pequeña pero prestigiosa pantalla del serial, publicado en este blog.

Al parecer, los incentivos que han motivado a los ejecutivos de tan rompedora cadena estadounidense de TV para filmar los avatares de GABRIEL T, DAMA DE PICAS y BUJÍAS, entre otros, se basan en la elaborada firmeza del carácter de éstos, lo explosivo y controvertido de la situación social que se esboza (ampliada en Soguetto, publicación que ha redundado en beneficio de la propuesta), la fuerte carga de acción y violencia de un mundo conducido al límite por mor de oscuros intereses.

Sólo puedo desear que las negociaciones queden pronto bien encarriladas y, por ejemplo, para el año que viene, hablar ya del episodio piloto. ¿Propuestas de casting?

viernes, 22 de diciembre de 2017

FELICES FIESTAS Y FECUNDO 2018

Siendo tradición que deseo perpetuar, un año más extiendo mis felicitaciones a cuantos lectores y paseantes se asomen a este blog, parabienes que son prefacio de las vacaciones de Navidad que pienso tomarme. (Esta vez no pienso enturbiarlo con lo de la saturnalia. Si sus devotos no quieren Pascuas, ¡ellos se las pierden!) De momento, sólo esto. Las recapitulaciones sobre 2017 serán la próxima semana.

Haya paz, moderación, y acompañe la programación de televisión.

domingo, 17 de diciembre de 2017

LA GUERRA DE LAS GALAXIAS — 40 AÑOS DESPUÉS

Conmemorativo afiche para la nostalgia.
Un poderoso surtido de referencias la
hicieron aún más grande
Este año celebramos el cuarenta aniversario (¡que no es poco!) del estreno de la primera película de STAR WARS. Por la fe que la misma Fox tenía del film, nadie hubiese creído, parafraseando a H.G. WELLS, que pudiera convertirse en el actual fenómeno social y base de una amplia porción de nuestra CultuPop de consumo y referencial.

GEORGE LUCAS, ese hombre tan desamable, dicen, nos mostró una galaxia muy, muy lejana, donde la maravilla era incesante. De inmediato borró de mi infantil memoria los relentes de recuerdos sobre el STAR TREK televisivo (falto de tal amplitud de horizontes). Éramos más ingenuos; estas fantasías escaseaban, o no se tenían tan serias como son ahora. Lo más fuerte que podías haber visto era LA FUGA DE LOGAN, la cual, contemplada con presente perspectiva, pega pellizcos.

La ciencia ficción seguía siendo ese cutre hermano pobretón de los Grandes Temas del Cine (algo ROGER CORMAN tiene de responsabilidad en su descrédito), aunque podía despuntar con algún título inquietante, pero cuya secuela era bastante endeble. El drama, el western, lo histórico, lo bélico… seguían reinando. Prometían: por siempre. La ciencia ficción y sus autores estaban (resignadamente) felices de ser eso de tercera categoría a la que, a veces, permitían atisbar vagones de segunda clase. ¡Impensable viajar en primera!

Secuela que mostraba más amplia aún
la galaxia. Con rincones muy sombríos
Hasta que Lucas rompe, de modo accidental, con toda esa tendencia maligna al demérito del género designado por Iluminadas Iluminarias que deciden, con despótico capricho, qué debemos amar u ODIAR. Desde una modesta distribución, La guerra de las galaxias se transforma en un espectacular fenómeno de masas gracias al boca-a-boca y el meticuloso hacer de una larvaria ILM (junto al veterano trabajo del elenco británico), que mostraba que si bien un hombre no podía volar, junto a una trepidante flota estelar los grandes temas morales se dirimían con sables láser de cegador resplandor.

Lo que sigue es bien sabido, aun por los más acendrados trekkies. Escalada hacia el esplendor y la maravilla. A la Fuerza, a citarse en las series y películas, a tener imitadores más/menos afortunados, a modificar un Star Trek anquilosado, víctima de aburridos pero pretenciosos argumentos e interpretaciones destinadas a un consumo propio, no al Gran Universo que Star Wars ofrece.

[Estimé máxima ironía que Star Trek dependiese de ILM para mostrarnos las angostas sendas de una Galaxia muy, muy cercana, llena de caretas estrafalarias. Pero eso es otra historia, como relataría MAKO.]

Presunto colofón. El Bien ganaba. Esa
ilusión no se traspasa al día-a-día
Hace cuarenta años, los cines empezaron a abarrotarse con las cintas de ciencia ficción; se ganaba el respeto de la crítica. El ejemplo de Lucas envalentonaba (gracias al éxito de su saga) a otros realizadores (acaso SPIELBERG sea de los más beneficiados) a saltar a la palestra con su panoplia de fantasías, brillantes, estremecedoras, decepcionantes. 

Sin ese inesperado/resonante éxito de La guerra de las galaxias, ¿tendríamos hoy MAD MAX, ROBOCOP, INDY JONES? Puede. Pero ¿de la poderosa magnitud actual?

¿Serían ejemplos del “continuará” de las matinés que alimentaron la imaginación del adolescente Lucas, con escenarios péplum de cartón piedra de Corman? A este respecto, debemos más a La guerra de las galaxias y la ‘afortunada’ tozudez de Lucas por culminar el proyecto de lo que pensamos. Este moderno cine de superhéroes, donde crees que un hombre puede volar, ¿no es quizás el heredero más afortunado de todos?

Aléjate de STAR TREK, LUKE. Haz caso a tu padre. Sus
tonterías son contagiosas
Los años revalidarán, opino, la ahora denostada “Primera Trilogía”; captarán detalles que, por una extraña inquina, se “ocultan” al público, como las fuertes matizaciones que tienen a esas matinés y al cine de Década 50 presentes en EL ATAQUE DE LOS CLONES. Sin embargo, hoy os animo a festejar poseamos un espectáculo como Star Wars, cuya leyenda se extenderá hasta el infinito y más allá (espero).

miércoles, 13 de diciembre de 2017

ROAD TO SOGUETTO — ENTREGA 20

Poderoso diálogo interior, hoy. No os lo perdáis
Orinando (no veas cómo tiemblan mis manos), descubro que eso que defino “quedas palabras” son, en realidad: voces pronunciadas un poco por encima de lo normal. Se debe: a la sordera parcial producida por el rápido/letal tiroteo.

No les dimos oportunidad (cosquillea un segmento de mi cerebro); no les diste oportunidad, muchacho.

Justo igual que ellos con nosotros (replico airado); venían en plan guerrero. Déspota. Apuntándonos con sus armas. Disparando desprecios con sus lenguas cargadas de irracionalidad racista. Una reacción pueblerina a lo que el PragmaSoc instala en las mentes del populux. Cierto que es vieja historia. Puedes nacer así. Te educaran de ese modo. Tienes empero libre albedrío. Negarte a perpetuar esa basura.

Es más cómodo aceptarlo; amoldarse. ¿Por qué crees que el PragmaSoc tiene tanto éxito? No quieres problemas. Evitas como sea quedar inscrito en el cuaderno de denuncias del Comisario de Bloque. O del Trabajo. ¿Olvidaste lo que contaba tu padre al respecto? ¿Cómo presionaron, a los tuyos, para que te entregaran al PragmaSoc?

Una novela "del género" estupenda que
recomiendo vivamente. Más distopía
de carácter inminente
Bastante bien (contesto a ese doloroso aguijón. Mi memoria funciona así: con incomparable claridad. —Voy avinagrándome; ya no me parece tan malo haber iniciado el tiroteo—.) Mataron a mis abuelos en el Pabellón Protocolo Once. No tengo muy claro qué fue de mis primos y tíos. Vaporizados en algún Campo de Reeducación Política.

Eras codiciado por el PragmaSoc. Inteligente. ¡Más que Stefan Roslov! Seríais ahora compañeros de aula. Con el cerebro lavado para aceptar las “realidades” del Socialismo Pragmático Internacional. Fotografiado junto a Roderick Shoemaker. Compartiendo tribuna en Pekín, ¡aclamado! por quinientos mil limones intimidados con rifles desde ángulos que la cámara no muestra. Educado por los Probetas de Eugenesia Asexuada.

Conozco la película. Llevo años viviéndola. (Cremallera arriba; giro el rostro hasta donde Dama de Picas y Bujías trajinan con la documentación “incautada”. Se embolsan los arrugados KS.) Huyendo de esa “realidad paralela”.

Pues esta vez anduvo MUY CERCA que acabaras protagonizándola.

Pienso averiguar qué ha sucedido… (ceñudo retorno junto a mis camaradas.)

Dama de Picas gesticula hacia mí. La palidez: fue menguando en su faz. También: en la de Bujías. Esa voz en alto que, sin embargo, semeja todavía un susurro:

—Veamos qué magia puedes hacer con esta documentación —solicita.

Papeles falsos. Passwords. Accesos hacia FUERZA a través de estos números de la SS. O alguna de sus IL más vulnerables a mis ataques hackers. Apenas veo esos sucios carnets: urdo su utilidad. De forma: automática. Cuan instinto insoslayable.

Obra altamente recomendable sobre
el Capitalismo Salvaje que GABRIEL
T define "Pax Corporativa"
—Poco puedo hacer ahora —barajo los carnets como naipes marcados que prepararan la Mano del Hombre Muerto. Rostros que me empeño en no ver; borrarlos. Ignorar de ellos todo lo posible—. Necesito tiempo. Estabilidad. Estos tíos han dado con nosotros —señalo los cadáveres—. Por azar, seguramente. Pero otros… la pasma, el enemigo… podrían tener esa suerte. Aparecer en cualquier momento…

Fíjate cómo nuestras miradas: enfocan la arenosa senda por la cual aparecieron los buggy-burbuja. Nuestros oídos: con dificultad captarían ahora el rugido de otros motores aproximándose. Aun cuestiono que me hayan oído los adultos.

—Cierto —afirma Bujías caviloso—. Larguémonos de aquí. De inmediato.

Continuará

domingo, 10 de diciembre de 2017

STAR WARS, EPISODIO III — LA VENGANZA DE LOS SITH

Afiche. Parece de DREW STRUZAN.
No estoy seguro
Próximo el estreno de la secuela de la decepcionante EPISODIO VII (porque salgan naves, no es buena), me parece oportuno rescatar para el respetable la película que cerraba la Primera Trilogía, la tan vapuleada, aunque, parece ser, según lo visto en la VII (pésima pese a salir naves), J.J. ABRAMS (¡errr!) va a hacer gloriosa. Y lo espero, porque la Primera Trilogía sufrió el acoso de gente que esperaba ignoro qué grandiespectacular en todos los fotogramas filmados. (No olvidéis que EL RETORNO DE JEDI tiene a los EWOKS, quienes exigen bastante de nuestra indulgencia.)

El contexto sociopolítico en que GEORGE LUCAS, ese hombre tan desagradable (dicen) pero aún más visionario, rueda la Primera Trilogía está empapado de la Gran Cruzada norteamericana contra el Terror Musulmán y un clima de pensamiento dominado por GEORGE BUSH, JR. y su gabinete, quienes exacerban el miedo como recurso electoral y establecen coercitivas normas de vuelo. No queremos más Skyhighs llenos de pasajeros chocando en el Empire State, por ejemplo, normas que imponen a todo el vasto globo.

Ese estado anímico impregna los libretos de la Primera Trilogía. Es menos glamourosa que la Segunda debido a que los tiempos eran diferentes, la ingenuidad mayor, el público de Década 80 amaba más la fantasía. La Primera Trilogía debe enfrentarse a un duro pragmatismo social ineludible.

La galaxia inmensa como nunca, surtida de vastos espacios
y escenarios, envidia total de los
trekkies
Establece la interesante/sutil analogía entre la corrupción que padece ANAKIN SKYWALKER, en ciernes DARH VADER, a manos del avejentado PALPATINE, identidad secreta del Sith Supremo DARTH SIDIOUS, y la inocencia de una generosa Norteamérica de postales pintadas por NORMAN ROCKWELL y los pánicos que impone el insidioso (“sidious”) George Bush, Jr. Lucas entiende que viola la concepción virginal de su nación para retorcer sus grandes poderes para hacer el bien en una cruzada perversa donde su ejército, lleno de su mayor delta de espectadores, libra combates crueles donde ningún botón permite reiniciar la partida.

La venganza de los Sith culmina la larga y retorcida cadena de insidias y maquinaciones en la sombra (que pueden ‘delatar’ a los lobbys armamentísticos y de seguridad que alimentan las campañas electorales de un candidato dispuesto a favorecer sus intereses —algo que OBI WAN, en EL ATAQUE DE LOS CLONES, señala a Anakin—) que transforman la realidad en un manipulado campo de batalla. Lucas transfiere al celuloide aquello que percibe ha sucedido en la política de su patria.

Cierto que ya salía antes, pero... ¿es PALPATINE una
traslación de GEORGE BUSH JR?
Por eso resulta tan desagradable al respetable la Primera Trilogía (nada decepcionante, pese a lo que el ‘selecto’ de SHELDON COOPER disparate en la serie): porque le recuerda demasiado al ahora. Ocurre que en vez de Marines y F-111 ve Stormtroopers y planetas extraños (acaso como el estadounidense corriente contempla al resto del ancho mundo), aunque el subconsciente pulsa sin parar. Sugiere que algo parecido aparece, de modo distinto, en los telediarios.

La Segunda Trilogía, imbuida de un laborioso Viaje del Héroe lleno de misticismo (la Fuerza), es por ese motivo, aparte de la admiración que las décadas transcurridas le han reportado, más grata al espectador. Es más escapista. Por otra parte, el cínico clima laico que están imponiendo podría arruinar la concepción “religiosa” que envuelve a la Segunda Trilogía, porque en alguna parte aparecería algún/a listo/a (¡cómo hay que andar con esto de los géneros!) denunciando que Lucas y YODA pretenden afiliarnos a una secta noséqué, que es un atentado contra nuestras republicanas instituciones laicas y que los niños querrán apuntarse al Opus Dei porque trasunta algo como la Fuerza.

Y, en esa línea, ANAKIN SKYWALKER una analogía de la
Buena Norteamérica podrida por los tipos como Bush, Jr.?
El poderoso festín visual que arropa la película se explica solo. He preferido, empero, destacar estos aspecto sociopolíticos porque son los que permiten comprender mejor la Primera Trilogía y obligaros, espero, a ¡aclamarla! debidamente.

miércoles, 6 de diciembre de 2017

ROAD TO SOGUETTO — ENTREGA 19

Vamos conociendo intimidades de nuestros protagonistas
en esta entrega
Convulsiones de músculos abdominales que prometen: desagradables calambres de estómago después. Lo que más ODIO de vomitar: la sensación de expansión de las sienes. Que: tu cerebro saldrá a presión por ojos y orejas, estallado el cráneo. Y qué decir: del asqueroso sabor como a trementina que la bilis impregna en el paladar.

Si pudiera someterlo. Según elimino líquido de mi vientre: los adultos aceptan su paliza por los actos cometidos con semblante rígido, exangüe. Expresan: deseo de estar en otro lugar. Las graves planicies de Marsoon. O una galaxia muy, muy lejana.

Otra arcada. Me avergüenza: me vean así. Débil. Inseguro. No el macho alfa que todos nos estimamos en nuestra imaginación. Un infalible Héroe Solar. De pronto, ahí está. Cálida. Compañera. Donando firmeza allá donde la he perdido. La mano de Dama de Picas intenta confortarme según acaricia mi espalda.

—Bien hecho. Lo has hecho MUY BIEN —premia junto a los reconstituyentes gestos—. Has protegido a los camaradas. Bien hecho. —Dedico: una débil sonrisa agotada a Dama de Picas. Cruzamos la mirada. Sé entonces: que todo estará bien. Irá de puta madre magistral—. ¿Mejor?
—Restablecido, sí, ajá. —Limpio mi barbilla húmeda con el dorso de la mano… que todavía empuña el Commander. Pensaba haberlo soltado apenas lo descargué. Pero: no. Hábitos inculcados por esta estricta

Por la alusión contenida en el texto,
me animo a recomendarosla de nuevo
(dominatrix)

maestra han calado de tal modo en mis reflejos que no puedo dejar el hierro tibio. Lo contemplo. Como a un extraño reptil decapitado. Tirarlo: es mi primera intención. Un acto claro de aborrecimiento por su funesto empleo. Bajo la mirada de acero, ¡MÁS ACERO! de Dama de Picas: lo dejo sobre la caja del aterrado gato—. ¿Muertos? —miro a los cuerpos tendidos sobre reseco follaje crepitante. Un escalofrío: me galvaniza.
—Como Julio César. Especialmente el barbudo. Reventaste su cráneo —indefinible estimo: el tono que emplea Dama de Picas. Exultación. Mera exposición de un hecho. Casual evaluación. Creo es: lo primero. Mi padawan aprovechó bien sus lecciones—. Has sabido protegernos. Eso es todo cuanto cuenta. Buenas noches y duerme bien.

Con gestos ligeramente mecánicos: Bujías enfunda su Eagle de reglamento. Primero, empero: lo ha recargado. Dama de Picas también efectúa esa tarea, que debo imitar. Sin embargo: ¡cópiate cómo tiemblan mis manos! Expongo con desnuda lucidez:

—Quiero orinar. O me lo haré encima. —Justo: otra secuela. Un intenso/imperioso deseo de mear que no supe iba acumulándose en mi vejiga.
—Adelante.

Elogios difícilmente superables que espero empero os
animen a seguir el resto de mi obra con igual entusiasmo
Dama de Picas se une al macilento Bujías. Quien sabe: controlarse mejor que yo. Tiene experiencia, claro. Estuvo en las Dunas. Aunque no combatió en sitios como Satanligrado o algo así, bregó con trajines marciales que marcaban. De por vida. O quizás contemplo: una secuela del Síndrome de Stern-Rush que padece, como todo vet que luchó allí. En unos se manifiesta con mayor virulencia que en otros.

Según descargo lluvia dorada: los adultos veo empiezan a saquear a los muertos. Revisan el contenido de sus bolsillos según intercambian quedas palabras, valorando la distinta mercancía que obtienen de este modo.

Continuará

domingo, 3 de diciembre de 2017

BODYCOUNT — PARA DESCEREBRADOS, DICEN

Abigarrada portada de una miniserie
de bajos fondos que acaba produciendo
indiferencia (o hastío)
Este parecer lo leí en otro blog. De entrada, parece un fuerte adjetivo insultante lanzado al desprecio del colectivo por una eminencia de la opinión y el tebeo que considera muy inferiores a la mayoría de quienes comparten su filia por las viñetas. Conviene resaltar que seres así existen, cuyo severo juicio implacable semeja al de un juez del Radamanto, sujeto al que imagino sobre un estrado administrando admoniciones sin compasión. Un freakie, en el fondo, con el suficiente refinamiento empero como para poder disimular tal condición.

También hay sosegados opinadores que emiten veredictos similares pero desde un ángulo ponderado, razonado, son atinados. Por alguna razón, esta segunda categoría (la buena) es la que menos seguidores cosecha. Quizás porque su mordiente no es tan ácido como el del primer grupo, que posee la habilidad, encima, de acaparar fans. El problema subyace en que la inteligencia media no es tan alta o de tal calidad como esperamos. Hay más afán de bronca que de reflexión.

De ahí el permanente estado de ánimo incendiario de las redes sociales, que lejos de apreciar qué democratización supone internet les sirve sólo para lapidar a quien opine distinto. Es una brutal herramienta del más extremo populismo, no el vehículo de promoción/comunicación al que parece destinaron estas redes sociales.

Va de tiros Tiros TIROS sin parar y
poca trama que masticar. BISLEY
intenta hacérnoslo más digerible
[Por suerte, descubrí que el número de tales peligrosos agitadores es pequeño, aunque sí contumaz. Logra hacer mucha espuma debido a su muy resonante actividad constante. Cuando decides ignorarles, ves cómo su virulento ODIO les consume y destruye, reduciéndolos a un esperpéntico esqueleto tricolor.]

Pero al tema: en efecto, pese a la dureza del término, Bodycount, otra ‘gracieta’ del tándem KEVIN EASTMAN/SIMON BISLEY, es para descerebrados... o lectores muuuuy indulgentes. Confieso que me enganchó el que fuese Bisley el autor de las viñetas, porque estaba fresco ese SLÁYNE fantásticamente pintado, junto al gamberrismo iconoclasta de LOBO (que fue decayendo tras la primera miniserie).

Bodycount podía haberse ideado como hábil sátira (lo intenta, pienso concedérselo) de los exagerados tiroteos de las películas de Hong-Kong que, por entonces (Década 90), desembarcaban en los videoclubs, establecimientos en vías de extinción hoy. CHOW YUN FAT ni paraba para recargar sus calibres hirvientes y la megamatanza nos dejaba zombies un rato. La moda nos pudo; pero siendo eso, moda, también declinó. Ha dejado una desagradable secuela en el cine de acción en general, no obstante: la de re-matar a un tío con veinticinco balas o más. No lo he estimado, ni entonces preso del auge de la moda, un recurso espectacular, sino puro sadismo. Proclives a él, ¡ha sabido perpetuarse!

Fatal enfrentamiento fratricida final.
Y te quedas preguntando ¿qué, ahora?
Bodycount desaprovecha no obstante la oportunidad de la elaborada ironía (limitaciones de Eastman) para relatar un feroz enconamiento entre hermanos mafiosos causado por un malentendido. Aaparecen, para darle a esto pálida enjundia, una de las inefables TORTUGAS NINJA, junto al tal CASEY JONES, que Bisley boceta como Sláyne/Lobo. Bisley sí intenta darle, a su línea, trazo paródico. Estira/distorsiona las figuras, sin conseguir llegar al entrañable humor gráfico tipo TEX AVERY o CHUCK JONES que parece pedían estas páginas.

Son figuras exageradas, contrahechas, que esperan lanzarnos una humorada, pese a que nuestros ojos siempre acaben reposando en la neumática versión de JULIE STRAIN (esposa de Eastman, creo) según iba preparándose para posar en F.A.K.K. 2. Y ya está. Sanseacabó. Apenas más puede contarse de una alocada miniserie que tiene tiros para reventar y sólo la querencia por el salvaje trazo de Bisley prende (dudo que lo haga ya tanto) lo suficiente para adquirirla… y luego lamentarlo.

[Pensaba escribir sobre que Bodycount era ejemplo del declive narrativo del tebeo de acción que sufrió Década 90, con la hiperviolencia y el erotismo fetichista y tal en ON que hoy condena las publicaciones. Pero, en justicia: también antes hubo pésimo cómic y cargar las tintas contra Bodycount no hubiera sido honesto.]

miércoles, 29 de noviembre de 2017

ROAD TO SOGUETTO — ENTREGA 18

Un brusco giro a los acontecimientos relatamos hoy
¿Sabéis qué ocurre a continuación? Orondo Buck no deja de mirar hambriento el busto de Dama de Picas; dudo intente ubicar a quién le recuerda su semblante (de Julie Strain), mientras su basta mano izquierda solicita papeles, venga, ¡LOS PAPELES!, para ver si somos norteamericanos de pura cepa o sólo tránsfugas de nuestra nación, acosada por la miseria que el PragmaSoc imprime a nuestras vidas.

Los otros permanecen al margen, expectantes a las decisiones que tome su hirsuto líder, que proceda de algún modo. Imagino, por esa sombría mueca que estampan en sus semblantes cansados por la vigilia, que piensan violarnos. A todos. No me extrañaría, aunque, en principio, sea Dama de Picas objeto de sus “atenciones”.

¿Qué sucede a continuación, según devoran con los ojos las curvas de Dama de Picas, deseando YA practicar las cochinadas de las webs warras que suelen consumir?

Disparo. Tres veces. Objetivo: la cara obscena de Orondo Buck.

Nadie me prestaba la más mínima-nimia atención. Un esmirriado con pinta de criminal John Connor adolescente inclinado sobre la caja de un gato asustado, cuya cara emula el miedo que el felino desprende en tenues oleadas. Hasta que el Commander truena, empuñado raudo. He aprendido

¡Hey hey! Imperdonable perderse esta serie
gráfica también. ¡Lo (casi) nunca visto!
(de Dama de Picas)

cómo sujetarlo, procurando que mis nitroexplosivas o crackeadoras atinen donde deben; o bien cerca. Ocurre: un milagro.

Parte del cráneo de Orondo Buck se inflama, estalla, esparce sedimentos óseos, cerebro. La cara adquiere, un borroso/vertiginoso instante, increíble expresión. No sorpresa. No pánico. Nada de eso. Es la carne removida por la vehemente entrada de los proyectiles. Su fuerza impide que los sesos despedazados procesen, ni por instinto, qué ocurre.

Aquí falla siempre la lírica al respecto; la que puedas leer en The Executioner o toda la demás literatura similar. Proyectiles a trescientos o cuatrocientos metros por segundo llevan una aterradora carga cinética. A esta distancia: es instantáneo. La muerte no puede estamparle una huella emocional en el rostro. No hay tiempo.

Sólo causa esa máscara trágica al ser sorprendido súbitamente por la Parca, y que el metal caliente haga estragos en el tejido por su poderosa barrena devastadora.

Mírala: según apunto a otro, Dama de Picas hace una genuflexión. Rápida. Limpia. Vet nata de las Dunas. Vacía su Millenium. Estampa agujeros sanguinolentos en el pecho de dos de los atacantes. Bujías reacciona. Estrépito. Las armas enemigas: no pueden competir con las nuestras.

Con una maestra así de bárbara y dispuesta,
¡normal que el muchacho despliegue este talento!
Seis segundos. Aunque parecen muchos más. Todos muertos. Proyectiles perdidos: desgarraron cortezas de árboles estremecidos por la cacofonía. Empieza a perderse. Semeja: bandada de aves intimidadas emprendiendo el vuelo. A toda: prisa.

Lo imagino… por supuesto. Pues estoy ensordecido por las detonaciones de mi propio calibre. Son las que aíslan mis martirizados tímpanos de las secuelas de las descargas de mis compañeros. Entonces: la adrenalina que tortura mis músculos se convierte en sed en mi boca, dolores en la cara interna de los muslos, presión en los testículos. Una arcada empieza a nacer. Igual: que esa ola gigantesca de la cabecera de Hawaii Five-0, la que veía en Canal Reposiciones. La original. Incluso oigo la melodía de Morton Stevens.

Me pliego para empezar a basquear hebras de saliva, trozos por digerir aún de la cena.
Continuará

domingo, 26 de noviembre de 2017

SUPERMAN RETURNS — EXCELSIOR!

Afiche de un filme que, para nada, quería
recordar existieran los títulos III y IV
Tras el amplio paréntesis surgido del nefasto Superman IV, como un poderoso esfuerzo por hacernos olvidar todo cuanto fue deteriorándose título tras título, BRYAN SINGER filma un elegante regreso del ÚLTIMO HIJO DE KRYPTON, con justo ritmo pausado, pero lleno de momentos electrizantes, y sobre todo, respetuoso con la imagen del llamado “más viejo boy scout del ancho mundo”.

Esta excelente película, de factura casi impecable (fallos tendrá, como todo, porque es obra humana y distamos de la perfección), empero ha recibido bastante vapuleo, aunque ignoro el motivo. Causas: el prota era un soseras, Superman no mata, no recaudó lo debido (quedó a un millón del coste de producción el día de su estreno, cuidado)… mil chuminadas y sandeces varias que inspiran la idea de la injusta veleidad de opinión de un freakismo fanático incapaz de decidir qué quiere pero con tiránico criterio impositivo.

Las nuevas de SPIDER-MAN (la de HOME COMING no la he visto; me refiero a las otras) son entre malas y deficientes. SUICIDE SQUAD es mala, producto para lucimiento de WILL SMITH. ¿Superman Returns penosa? Fatal vais, freakies.

El envidioso supremo regresa a un lugar que no le es nada
desconocido. Este SUPERMAN RETURNS estaba pensado
para ser el primer título de una saga que iba a más.
Frustraron esa intención
Comparadla con las anteriores, las que violaron los SALKIND sin compasión queriendo hacer una burda comedia de un personaje amable y quizás bastante ingenuo que no obstante se vuelca por ayudarnos en nuestros duros días-a-días, transformándolo en un bufón superpoderoso al que le colocaron una histérica bulímica egoísta de novia y una colección de memos como lastre de la acción. Entonces, Superman Returns remonta por encima de muchas otras (empezando por esas de los Salkind) que obtienen estimación sobrevalorada de ese público veleta.

Su protagonista acomete dura tarea: hacernos olvidar (imposible) al malogrado CHRISTOPHER REEVE. Era su presencia la que dignificaba todas las mierdas que habían incrustado en guiones inefables que no merecían ni siquiera ser valorados por la Warner. Singer extiende respetuoso un manto de agradable continuidad con aquél Superman del siglo XX con el que emprendía vuelo en el XXI; cierto que recicla bastante material del filmado, pero pretendiendo encadenar películas. Mas, sobre todo, impera el respeto por la imagen de un icono gráfico que pocas veces recibe un trato justo.

La mujer que puede hacer sensible un corazón de acero. Un
motivo más (o el motivo) para salvar el mundo día-a-día
El freakismo se volcó con MAN OF STEEL porque era un Superman “moderno”: oscuro, a lo BATMAN de CHRISTOPHER NOLAN, ‘complejo’, capaz de matar. Superpoderoso que no veas, de acuerdo. El duelo final es impactante, probablemente de los mejores rodados con criaturas con superfuerza. Pero Superman dona más: bondad, generosidad, paciencia. Querer guiar, no liderar, pues KAL-EL comprende que el mando causa soledad (bastante solo está ya) y enemistades. Le sobran, con todos los envidiosos tarados (LEX LUTHOR en cabeza) que combate. ¿Puede ponerse a una parte importante del amplio planeta en contra, que juzgará sus decisiones arbitrarias, equivocadas, egoístas… antiamericanas incluso? Ya soportamos demasiados políticos supremacistas mesiánicos/presidencialistas como para que, encima, un ser quasi divino nos controle o dicte la existencia.

Sin vacilar, perfectamente consciente de sus poderes, otra
vez Superman acomete las enormes dificultades
El HOMBRE DE ACERO sí está preparado para esa tarea. Su ‘visión superior’ le dice qué nos conviene, qué no. Es sólo cuestión de sacrificio y disciplina ajustarnos a sus normas. ¡Es por nuestro bien! Ese Hombre de Acero es sujeto poco de fiar, frío, distante, pese a que intenten convencernos que es el mismo Superman que encarnara Reeve. Los patrones de bondad, paciencia e indulgencia que GLENN FORD le inculcara no son los mismos que dispendia un escarpado KEVIN COSTNER, pese a pretenderlo.

Es lamentable que nuestra Sociedad prefiera “al que puede matar” al que “puede educar”. Rompo esta lanza a favor de Superman Returns. Y deseo cunda el ejemplo. Lo merece. Espero que, en breve, el tiempo la sitúe en preponderante lugar.

miércoles, 22 de noviembre de 2017

ROAD TO SOGUETTO — ENTREGA 17

Avance: una nueva amenaza se materializa
»Las generan situaciones similares. Por culpa del cine. Y estos tíos tienen pinta de ser adictos a todas esas porquerías.

La demora, la duda a que Bujías no siga DE INMEDIATO a Dama de Picas en su intención de abrir fuego, matando indiscriminadamente a estos palurdos: permite bajen de sus buggys-burbuja mostrando sus viejos M16 y carabinas Best Patriot, unas que fabrican para esta gentuza en Atlanta y exhiben extraños customizados SS.

Fíjate: parecen haber salido, de verdad, de un episodio de The A-Team o McGiver; algo así. Muestran panza cervecera, barbas de varios días, apelmazadas por la suciedad, parches NeoSkinceltas o Nación Aria en las chaquetas, junto a banderas Dixie, los revólveres y calibres sobresaliendo de sus tejanos desteñidos y pantalones de faena de FRENTE deseando intimidar.

¿Cuánto sabrían usarlos, DE VERDAD, en caso de enfrentarse a curtidos vets como Dama de Picas? Porque éstos no tienen pinta de haber estado en la Guerra de las Dunas. Ni llegaban a Soldados Búfalo, júralo.

Nuestro joven narrador, ¡qué carrera
tan pavorosa demuestra haber
seguido en esta novela!
En cambio… estaban aquí, defendiendo la patria del invasor pringoso chicano, achicharrando pachucos en antros construidos con chapa ondulada, pegando palizas los sábados noche a gente de rostro oscuro. Unos estaban en ultramar, dejándose el pellejo contra los mojamés y las fátimas fanáticas; ellos hacían su parte aquí.

Contra inmigrantes débiles y aterrados. Evitan empero a los recios soldados de los cárteles, operativos de los Barones de la Coca. Pueden acabar luciendo corbatas colombianas como mínimo. Con esos rostros oscuros sudorosos… precaución.
Allá va: el líder de la sucia gorra de béisbol con la escopeta BAD que balancea un instante antes de apuntar a Dama de Picas con ella. La dominatrix adquiere un soberano semblante al momento, retador. Los ojos oscuros: refractarios a la piedad.

—¿Qué tenemos aquí? ¿Unas bonitas tetas junto a un judío que parece más un mojamé? ¿Y ese chaval? —me señala con un gesto del hirsuto mentón. ODIO que insulten a los míos. Adquiero: mi desconcertante rostro de adulto. La mirada Sith. No sofoca, empero: las malditas risas de los cuatro descastados.

Dos llevan botas vaqueras. Con punteras de bronce. Muy sucias. Flacos. Como comidos por las drogas. Más gorras junto a sombreros Stetson orilladas la copa por manchas de sudor seco. Como costras imprecisas de sal del Mar Muerto.

Bujías mira inquieto a Dama de Picas. Una apariencia de miedo y debilidad: lo enmascara. No sé cuánto lo finge, en este momento. El grupo repara en el Relámpago Rojo. La Jonathan Kent. Creo: ciertos engranajes empiezan a girar de otro modo dentro de sus obtusas aunque peligrosas seseras.

Y ¡alegría! Una plancha espectacurlar
de
BIANCA BLAZE. Envidia debe dar
—Un momento, Buck —el delgado con melladuras en los dientes; barba sucia corta. Sus ojos: parecen perder el azul con cada trago de whisky que toma—. ¡Un momento! Llevamos toda la noche oyendo en la CB sobre un operativo cerca de Buen Rey. Creíamos que intentaban impedir una entrada masiva de mejicanos. Por eso salimos a patrullar. Pero oímos también algo sobre… peligrosos terroristas. —Las caras, alimentadas con café fuerte para resistir la larga vigilia: empiezan a adquirir otras sombras. Matices más preocupantes—. Huyeron en un… deportivo —su M16 apunta al Relámpago Rojo—. Eso es un deportivo. ¡Vosotros! ¿Quiénes sois? ¡Los papeles!

—Eso —impone Orondo Buck—. ¿Quiénes sois y de dónde salís? —entorna los párpados según su arma pasa de uno a otro de nosotros.
Continuará

domingo, 19 de noviembre de 2017

HIGHLANDER II — LOS OLVIDADOS

Eso, CHRISTOPHER LAMBERT, mira a lo
alto; encomiéndate al Altísimo, porque de
ésta no te recuperaste
Debo ser honesto admitiendo que apenas recuerdo mucho de esta fallida secuela. He hecho esfuerzos por olvidarla. Creo que sustituiré las lagunas que pueda demostrar al respecto con la anécdota del día del estreno. Tampoco es grandiosa; no pasó nada. Pero tengo que completar la reseña con algo más que un par de líneas afirmando que ¡vaya mierda de película!, ¡qué generosa decepción!, ¡esta es la tumba de RUSSEL MULCAHY!

Atrapado por la brillante e imaginativa puesta en escena del primer LOS INMORTALES, era obligado estar de los primeros el estreno (¡nada menos!) ante la taquilla para ser de esos freakies que, en el futuro, afirmasen ufanos YO ESTABA ALLÍ EL DÍA DEL ESTRENO, ¡SUPERAD ESO!, manifestando ese inefable orgullo que los personajes de THE BIG BANG THEORY exponen por sus videojuegos, cómics, filmes, juegos de rol.

Cuando eres freakie, eso cuenta. Un wevo. Los del fútbol: no nos señaléis con ese grosero dedo despectivo porque vosotros sois también esclavos de este apasionamiento. Sólo que, al ser “el deporte rey” (para ser rey, ¡cuántos republicanos lo siguen, oigan!), prima otro sentimiento de “madurez”. (Aunque considerando que el deporte rey lo practican jóvenes atléticos en ropa interior, ¿seguro que no late otro deseo bajo este seguimiento al fútbol?)

Ya aquì empecé a preguntarme qué estaba viendo,
que lo único inmortal sería el rechazo a esta película
Ocupamos las butacas, empieza la proyección… las revistas ¡exaltaban! el metraje, mas nos preguntábamos qué habían visto esos críticos para dispensar aquellos ditirambos a una producción floja, caótica, con montaje insulso y trama carente de sentido y magia.

Mientras que la precuela rezumaba una suerte de elevado misticismo que no necesitaba explicación (como la Fuerza), aquí hablaban de alianzas rebeldes, planetas remotos, punkies siderales estilo Heavy Metal surcando un tenebroso decorado propio de BRAZIL y duelos a espadas faltos de la energía de la primera parte. MICHAEL IRONSIDE intentó emular desesperadamente los peores momentos de EL KURGAN, estrellando un tren a toda velocidad para demostrar que era un inmortal lleno de despropósitos, no del bárbaro empuje básico/codicioso de su predecesor.

Los desmanes se disparan y disparatan. El melenas pregunta
a Lambert si superará la audición para 
FURY ROAD
‘Resucitar’ a SEAN CONNERY debió avisarnos de qué pésimo era el producto. La química entre maestro y padawan de la primera debía recuperarse COMO FUERA, porque esto NO FUNCIONA, señores, ¡NO FUNCIONA!, que hemos alquilado un set de DUNE procurando darle empaque a una historia fabricada a pellizcos. Es desafortunado regreso el del español RAMÍREZ (por una vez entre los anglos, ¡somos los buenos!), pues suma su triste re-aparición al resto de desmanes de estos Los Inmortales II, distopía totalitaria tenebrosa pero no por eso menos manida.

Le veo empero un detalle… positivo: la hecatombe climática que fuerza a proteger la Tierra con un aura de energía que la escude de los abrasadores rayos ultraV, al haber desaparecido la capa de ozono. Por entonces, el hallazgo era novedoso (los agujeros en la capa de ozono de la Antártida), y pensaron que sus peores extremos servirían de válido argumento para cautivar nuestro interés, justificando la existencia de otra secuela que tampoco merecía desarrollo.

SEAN CONNERY fingiendo que actúa según busca la salida
a esta pésima película. No sé cómo me he dejado embaucar.
¿Estará por allí la puerta para escapar?
No siendo no obstante propuesta original, ha habido mucho cine “de catástrofes”, que apelen a una calamidad climática ya muestra primitivo indicio de la “nueva conciencia naturalista” que, al menos como motor económico, el cine estaba cobrando. Inauguraba esta película una estela de desastres naturales (erupciones, tornados, meteoros gigantes) característicos del cine de Década 90. De pronto, las despreciadas denuncias de los melenudos ecologistas dejaban de ser paridas hippies para convertirse en la actual palpitante preocupación que tiene instalado en ON el conmutador del Cambio Cli. Es, visto así, la primera producción que tiene presente dicho cambio como aviso de lo que se avecina. Quizás esto… No, esto es sólo anecdótico. No revaloriza la película. (Y aun así, conviene reconocer que la aún más olvidada tercera parte ¡es peor que ésta! -Y, ni citar quiero, la serie de TV y demás aberraciones realizadas al amparo de Los Inmortales. ¡Vaya modo de reventar una licencia!-.)