viernes, 26 de noviembre de 2021

LAS “PELÍCULAS” DE ALAN MOORE — UN HOMBRE TIENE UNA IDEA…

 

Afiche de esta monserga. Cuando
vi por las calles a tantos gilipollas
usando esa máscara, se me vino
abajo la mítica. ¿Acaso sabían de
qué iba el enmascarado? Hace
ALAN MOORE mal, empero,
jaleando a quienes la usan, por
no conocer su significado. Es
mero postureo; moda

…y la idea atrae a otros hombres, etc. ¿Cómo acaba la idea? Siendo una cara y decepcionante muestra del ansia recaudatoria por parte de un Hollywood sin ideas que ha encontrado en concreta obra, repentinamente popular y llamativa, el poder ingresar en sus arcas un pa$tón. Alan Moore ha terminado completamente exasperado por la violación que esos estudios han hecho de su obra, exigiendo no vinculen su nombre a las películas hasta ahora filmadas de sus historias, apoyándose en diversas matizaciones que debieran hacerle plantearse llamar a STEPHEN KING (¡aclamad al escritor!) para preguntarle: Hey, Stephen, ¿cómo llevas el que Hollywood adapte una novela tuya como le sale de los cojones, apenas respetando tu premisa un mínimo-nimio? Porque se trata de eso: de respetar la idea original porque, en los casos que aludimos, son más luminosas que lo filmado.

Rodado siguiendo los patrones de insaciable avaricia cuyos guiones trastocan conceptos definitivamente delimitados. Caso clamoroso, centrados en King: LA TORRE OSCURA. Durante cientos de páginas bien declara que ROLANDO DESCHAINES viene a ser una versión de CLINT EASTWOOD en ese plano de la Torre Oscura. Y ¿quién le interpreta? IDRIS ELBA. Será un magnífico actor, no se discute. Pero el hombre es negro. Bastante heavy fue ya que actuase de HEIMDALL.

Esas aberraciones King parece haber aprendido a sobrellevarlas, aceptando a modo de compensación el dinero (Moore, no, como gesto de dignidad), y resignándose a ver cómo destrozan su novela.

Moore quizás razonara esto y aprendiera a resignarse (aunque sé es duro). Está empero emperrado en no coger el ca$h (muestra definitiva de prostitución, supongo entiende es) confiando que esta visceral protesta espabile algunas consciencias en Hollywood. Pues las lleva claras, el británico. Pocas entrañas hay en el moderno Tinseltown amariconado y femirulo actual que, empero, para eso se sensibilicen con semejantes actos de repudia.

No puedo comentar la comparación
entre la novela gráfica y la cinta al
no haber leído la primera. Mas me
pareció decente adaptación. Igual
luego pierde bastante...

No comento FROM HELL pues no he leído la vasta y exhaustiva obra que tanto tiempo llevó concluir. Sí las otras tres: LA LIGA DE LOS CABALLEROS EXTRAORDINARIOS; WATCHMEN y V DE VENDETTA, declarando de antemano que son porquerías muy bien revestidas. Veámoslas:

Hasta la cinta, casi tenía en un altar la novela gráfica de V de Vendetta. Elabora principios morales que me han sugerido aceptar lo único válido de la acracia: cuestiona. Cuestiona a los líderes. Las causas. Los movimientos.

Cuando tras el estreno veo a un sinnúmero de apalancados gilipollas con la careta de V, se desplomó la mítica. Esos tiparracos no habían leído una página. No habían asimilado la obra. Mas allí estaban: explotados por un mercantilismo visual semejante a una dictadura que les había vendido esa pálida careta, so pretexto de sigul reivindicativo, que paseaban por ahí haciendo gratis la promoción a la nefasta adaptación, no a la historieta.

Porque es nefastísima. Cogieron aquí/allí elementos que sonaban rimbombantes y cinematográficos, creando una versión postnuclear de EL FANTASMA DE LA ÓPERA y lo situaron en un Londres dictatorial que tenía poco de despótico y mucho de metacril resplandeciente. ¿La elaboradísima idea de oscuro barroquismo de Moore? Postales de la Noche del Diablo. Cabreo justificado del escritor.

Farragosa. Larga. Presuntuosa.
Moore acertó al afirmar lo
compleja que era de adaptar al
fotograma. Eso, al voraz Hollywood.
le importa tres pimientos. ¿Da pasta?
Hagámosla. Exprimamos a los
freakies. Para eso están

Watchmen es todavía más MÁS criminal. La serie es, de por sí, inadaptable por mor de la densidad de información, visual e intelectual, que posee, diseñada para que el lector empatice con los personajes, comprendiendo las entretelas de sus cuitas. Mas ¿qué sacamos en claro? Un primer plano del culo azul de DR. MANHATTAN. Una rotación dolorosa de la fecunda trama, eliminando elementos que brindaban mayor/mejor comprensión del conjunto de la historia, y fabricando una inefable trama en que Manhattan es el destructor del mundo porque eso de que OZIMANDIAS hubiese urdido aquél complicado plan para evitar el apoqueclipse atómico es demasiado elaborado para la mente estadounidense, al parecer, y del resto del planeta.

Hacemos malo al nudista azul porque los despelotados son pervertidos, y ¡Santas Pascuas! Otra postal de la Noche del Diablo.

La liga de los Etc. es quizás, si no la peor, la más deplorable, porque sin llegar a los niveles de compleja profundidad de las dos obras antes comentadas, filmaron material extraído de sabe Dios dónde (¿TOM SAWYER? Seamos serios. ¿Venecia? ¿De qué vais? ¿DORIAN GRAY? Tócame las bolas, menosmolas) pensando hacerse los creativos, supongo, porque, aun cambiando varios elementos de la novela gráfica, por mor de agilizar la acción y tal, Moore entregó en bloque, aun en storyboard, cómo debía ser el filme, desde qué ángulo enfocarlo incluso.

Baste comentar que el difunto
SEAN CONNERY acabó diciendo
de todo y malo del resultado

Y ¿qué hacen? Sacan a LA MASA en Siberia mientras los demás abortan el exagerado proyecto de incendiar el mundo en la Primera Guerra Mundial ideado por un recreado Fantasma de la Ópera-MORIARTY. Unos aires de grandeza wagneriana-hollywoodiense que pudieron ahorrarse. Porque el trabajo ya estaba hecho (la historieta) y era sólido. Mas prefirieron ciscarse encima de la obra. ¿Cabreado Moore? No. Lo siguiente.

Ineptitud, arrogancia, despilfarro, toda una sucesión de desatinos destinados a granjearse un público casi infantilizado que luego les pone muchas estrellitas, o muchos “me gusta”, por caprichosa moda. Porque el simple detalle de dedicarle una hora a leerse estas obras es trabajo de HÉRCULES para sus mentes, medio idiotizadas por una cultura de la imagen tan acelerada como desconcertante, carente de fundamentos.

viernes, 19 de noviembre de 2021

HECHIZO EN NORTHAMTON, UNA BIOLOCALIZACIÓN DE ALAN MOORE — UN HOMBRE TIENE UNA IDEA…

 

Portada del libro, exhaustivo
repaso de la vida de este genio
británico. Irónicamente, quienes
ahora están destrozando su mito
son de la ideología que practica,
no los conservadores que suele
criticar en sus obras

…la idea atrae a otros hombres; la idea se convierte en una institución. ¿Cuál era la idea? (TOP DOLLAR dixit.) La pregunta al final quiere señalar que, conforme la idea ganaba adeptos (en este caso, los imitadores que el barbado escritor ha tenido), éstos sumaban sus pareceres, deformando de tal modo la idea (el abuso del “superhéroe oscuro”) que ésta quedaba reducida a postales de la Noche del Diablo. Mercantilismo.

Este espléndido libro de ALEJANDRO BARBA tiene dos inconvenientes; a saber: su poca difusión (más merece) y que se centra en un tema para especializados, o especialistas: la (psico)biografía del genial historietista (y actividades anejas a la divulgación, la imagen, la música…) quien pasmó al mundo de las viñetas, desde casi comienzos de Década 80, con obras tan refinadas, controvertidas e imitadas como V DE VENDETTA y la más célebre: WATCHMEN. En efecto: hablamos de Alan Moore, hombre-espectáculo que explora sin cesar vertientes polémicas, si fuese necesario, para procurar encontrarse en ese laberinto que es su peculiar vida.

Porque, Alejandro, lo que tu admirado Moore hace es intentar encontrarse. Recurrir a la magia (al ocultismo, pienso lo describe mejor) es la muestra más desesperada de su huida al miedo a no saber quién es (acaso por eso se esfuerza por conocer cada centímetro de su ciudad natal, por si encuentra rastro mínimo-nimio de algo que le conduzca a sí mismo por ahí) y querer encontrarse para, por fin, hallar la pax que reclama.

El autor, ALEJANDRO BARBA,
a la derecha. El señor mayor es
ALAN GRANT, veterano de
2000AD, sobre todo

Al margen de esto, o acaso como consecuencia, destaca su actividad prolífica, inagotable, cómo encara cada reto artístico con efusiva energía (la que constante describes con tu esmerada y prolija prosa, estilo literario docto, elegante, depurado, tan ameno como didáctico), esa furia genial que le distingue de la mediocridad general. Ese mismo ingenio le lleva a la extravagancia (el ocultismo —sería cauto con alguien que afirma haber garlado con un dios sierpe, al que venera, tras haber “experimentado” con psicotrópicos, pues parece el inicio de la locura que tanto teme padecer—), impresa en su imagen casi de chatarrero, siendo a un tiempo válvula de escape de los enormes bríos creativos que bullen en su interior, como manías de un hombre excepcional.

Está bien documentada, detallada hasta lo extenuante, esta biografía que tanto procuro por encomiar y recomendar. Compuesto de seis capítulos, subdivididos a su vez en varias entradas cada capítulo, hace completo examen de la vida personal y trayectoria profesional de Moore, desde la pringosa fábrica a la “gloria” de ser acosado en los lavabos por los freakies en la convención aquella de cómic. Pasando a continuación por su caída (se pasa pronto del hosanna al crucifícale) y el resurgir, el de ABC COMICS de comienzo del milenio, que, feminismos radicales aparte, concluye en esa placidez de la tercera edad (ajá, sí) que parece gozar ahora. Quizás al fin se encontró a sí mismo. Tal vez vio que su obra estaba culminada y, como Dios, al séptimo día descansó.

ALAN MOORE, algo más joven, en su residencia
habitual. Fuertemente ligado a su terruño, no cree
que deba emigrar a escenarios cosmopolitas para
inspirarse o crear. A Moore le pasa como a éste,
vuestro
Scriptor: considera las obras un conjunto
de elementos que influyen en el transcurso del
relato de diverso modo. Es un elemento fluido.
Por otra parte, su apreciación despectiva sobre
Los Vengadores y al público maduro que gusta,
es errónea, Y ahora explico por qué

Llamativo detalle, referente a su vida personal, porque la profesional está documentada y es accesible (acaso en títulos como SUPREME o W.I.L.D.CATS, aun SPAWN, que parecen demasiado frívolos y bastardos para Alan Moore), es que su primera pareja, la biX, le deja por la otra con la que convivían (un nido de cotilleos malsanos, esa situación “matrimonial”) y, sin embargo, con su actual esposa, que lleva la tira de años, la cosa perdura. La convencional vida heteroX le ha aportado una estable “continuidad” que la fogosa relación de trío no proporcionó. No sé si ha reflexionado sobre la cuestión.

Al hilo de esto destaco el aparato político de sus creencias. Moore vive en un insostenible espejismo ácrata. No sé si debido a sus creencias, o por la hierba del diablo que consume, o sumadas, pero está archiconvencido de que la anarquía es EL sistema político válido (su primer matrimonio lo desmiente), y apela a lo de Atenas como ejemplo, pese a su endeble validez.

El problema es que Moore es hombre íntegro. Cumple con sus compromisos y convicciones, y supone que todo cristiano a su alrededor es igual. ¿Acaso las experiencias editoriales, o la de JIM LEE, no le han persuadido de que el codicioso elemento humano desbarata su lógica anarquista de gobierno? ¿Cuántos Jim Lee no poblarían su régimen “ideal”? ¿Qué pretende hacer, cuando le traicionen? ¿No hablarles, como a DAVID LLOYD, o DAVE GIBBONS? ¿Enrocarse en la dignidad de no querer el dinero de las lamentables películas que adaptan sus historias? ¿Cree que eso reformaría a los fraudulentos anarcos que persiguen ser aquello que quieren derrocar, en el fondo? ¿No conoce, hombre tan culto, la criminal historia opresiva del comunismo y la URSS?

El milenio empieza con TOM
STRONG y otra batería de obras
que acomete Moore con arrojo.
Así intenta reconciliarse con
la ficción, más simple, que le
motivó en la infancia. La misma
que agradecen los otoñales que
flipan con
Los Vengadores. Les
devuelve a tiempos más gratos, a
fantasías
no inclusivas politizadas

En ese sentido (y abundo en él, porque ocupa espacio en esta biolocalización, e impregna sus obras), Moore es de los que despanzurran al capitalismo y los males de la democracia parlamentaria, pero cuando le preguntas por Cuba, o Venezuela, o mira hacia otro lado con avinagrado rictus erectus, o te espeta una chorrada, refrescando su discurso sobre los males del parlamentarismo corrupto y el capitalismo explotador.

Es otra huida, mas hacia el hipócrita cinismo. En su disputa con FRANK MILLER por lo que podemos comparar como el 15-M norteamericano, Moore no tiene razón. Sí Miller. Porque, agitando a la masa de legítimos ofendidos, estaban niños bien pijipogres que, para escapar de sus negadas vidas, se apuntaron al anarcofascismo de la careta de V, consiguiendo en recompensa so pretexto de estar erradicando los problemas de los pobres chalets de seiscientos mil euros y/o ministerios.

Sin embargo, prefiero más resaltar las virtudes de este estupendo libro, el cual debería haber tenido difusión mucho más amplia, sobre todo entre los aficionados a la Historia de la Historieta, y de Alan Moore en particular. Fecundo, agradable, interesante, espero que Alejandro goce de una segunda oportunidad para poder difundir este documento a un diverso público más amplio.

viernes, 12 de noviembre de 2021

GRAN GOLPE EN LA PEQUEÑA CHINA — COMO DICE JACK BURTON…

 

Colorido afiche de DREW
STRUZAN (¡aclamad al
autor!) para una película que
no creo critique los clichés
del héroe imperialista
bianco
tóxico macho alfa (al decir
de los tontainas de hoy día),
sino que mejor lo humaniza

Entre las singularidades de esta comedia fantástica de acción de JOHN CARPENTER está que los biancos son la minoría; al menos, en pantalla de plata. Jack Burton, el personaje de KURT RUSSELL, es a momentos un simplón secuaz de su camarada chino, quien emprende audaz el rescate de su novia raptada por los TORMENTA, sicarios inspirados en los SEÑORES DE LA MUERTE de EL ASESINO DEL SHOGUN.

Es algún momento de mediados de Década 80 (que, conforme avanza esta segunda del Tercer Milenio, más prodigiosa y mágica se hace, no sólo por la otoñal nostalgia que sus supervivientes demostremos, sino porque REALMENTE las cosas están adquiriendo un pernicioso cariz “zoociocultural”) y las producciones de este tipo obtienen luz verde para existir. Una más afortunadas o inspiradas que otras. Es como si, en Hollywood, hubiesen oteado el horizonte advirtiendo algo que les hizo gritar: ¡Hey hey, gente! ¡Hay inmensa cantidad de peña allá al fondo HAMBRIENTA de buenas diversiones, de ocio, de historias fantabulosas que disparen todavía más su imaginación! ¡Hey hey! Démoselas.

Luego dependía del talento de cada cual para que lo que consumíamos fuesen aceptable, deleznable o despreciable. Por cada JAMES CAMERON, o Carpenter, había cuarenta Fulanitos de Tal mediocres, o nulos. Ocurre hoy, aunque parece que eso está más tapado.

Muy recuperados de su enfrentamiento a ITTO
OGAMI, los "sobrenaturales" sicarios se disponen
a darle el día a BURTON y su amigo chino

Lo importante es que entonces había ciertos dinosaurios, los productores, con instinto para una sola cosa: money. Eran fumadores de puros con papada y algunas otras feas costumbres. Empero tenían un admirable ojo clínico para los negocio$ y sabían, por haberle tomado el pulso, qué afiebraba al personal. Esa gente, de basto aspecto grosero, fueron los que, en la música, apadrinaron a QUEEN o POLICE, los músicos que pusieron al planeta a bailar durante Década 80. (Hoy día ignoro quién lo hace. Lo que veo en TV son mindundis estéticamente metrosexuales con “tenue” sesgo afeminado, o matones negruzcos cuyos movimientos semejan amenazas según riman.)

Hoy esos dinosaurios son petróleo. O van camino de convertirse en hidrocarburos. Les sustituyen atildados graduados de Harvard, muy esmerilados en todo, metrosexuales veganos gimnasiasta-maquillados, comprometidos con cuantas causas piensan están en IN. Y, como bastardos de la Generación de Cristal, esa aberración indescriptible zoociocultural, hacen sólo lo que a ellos les gusta, pues entienden es el criterio global. Su producción inserta numerosa cantidad de variedad étnica, género LVDRA+ y, sobre todo, feminista. De qué vaya la historia, no importa. Vital: la representación coral+.

¡Misión conseguida! Empero salir de la fortaleza
del dragón (chino) con las princesas prometidas,
va a ser más complicado que rescatarlas...

Pues Gran golpe en la Pequeña China manifiesta que antes “del Cristal” existía gente con sensibilidad capaz de dar relevancia a las minorías, transformando a la mayoría en la minoría. Además, criticando sus supuestas virtudes. Burton a duras penas da en el clavo, ni de chamba. En un combate crucial, se autonoquea disparando al techo. Los cascotes le golpean, tumbándole. Todo el heroísmo surge de los aparentemente secundarios. Hay tres caucásicos, si he contado bien, en la trama. El resto: asiáticos que satirizan con astucia el cine de hostias de Hong Kong-BRUCE LEE. Para culminar su victoria final precisan que Burton les saque de la guarida del Mal en su camión. Es lo más trascendental, piensas, que Jack (otro ejemplo de “masculinidad tóxica”) hace por todos, aparte de mostrar solidaridad inquebrantable con su camarada en problemas.

Desde el más allá, LO PAN pretende regresar a la
carne y sus problemas y demás ambiciones

Es paradigma del buen cine que utiliza para realizarse los tópicos del “tóxico imperialismobianco” como ahora definen esos mequetrefes “nuestro” cine. No importa que el caucásico la cague o triunfe el asiático. Comprendes que todas las razas tienen héroes y villanos. Ocurre que mientras Carpenter hace una exhibición de sagacidad y espectáculo, los de ahora lo convierten todo en un estrafalario “panfleto pro-minorías”, todo muy rosa y lila, millone$ volcados a una estéril fantochada políticamente correcta. Por desgracia, hasta el próximo RIDDICK redentor, queda dura travesía aún por delante por mor de esos ácidos mequetrefes de cristal. Cuántas gilipolleces por conocer…

viernes, 5 de noviembre de 2021

DOC SAVAGE Nº 9 – LA CAMPANA VERDE — DOC, REVALIDA SU LEYENDA

 

Oscura portada para este escapismo
sin traza progrepolítica, al contrario
de como debe suceder ahora. Todo
por un compromiso vacío empero
rimbombante prominorías

Si en LA CALAVERA ROJA vemos a un Doc Savage y sus CINCO FABULOSOS COMPAÑEROS que merodean la desastrosa mediocridad, KENNETH ROBESON (alias de LESTER DENT) recupera aquí el impresionante poderío de EL HOMBRE DE BRONCE en una aventura que puede recordarnos PRIMERA SANGRE, pues la policía acorrala al Aventurero Supremo (y no por un tirado sheriff de un pueblo perdido de Norteamérica, sino por agencias estatales —el FBI del controvertido J.E. HOOVER—) en su intento de desentramar la compleja maraña en envuelve al misterioso Campana Verde (aunque el  título anglo leas EL ZAR DEL TERROR; licencias que se tomaron, supongo).

Las broncíneas andanzas del joven Savage se definen en tres partes. Comienzan con un prólogo, de cierta extensión, donde presentan al que pide ayuda y parte de las acechanzas que amenazan destruirle, el escenario donde esta agresión se despliega, sigue la participación de Doc y sus Ayudantes, junto a sus inventos, y llega el desenlace, el cual puede suceder a las famosas tres mil millas de distancia del punto de origen.

Todo asimismo desarrolla un clima de majestuoso admiración por las grandes facultades, físicas y mentales, del Hombre de Bronce, el cual empero a veces recurre a ardides un tanto pueriles (difíciles de aceptar hasta para el más entregado de sus fans, si es honesto), como en este pulp es llevar petardos en los bolsillos (!) para confundir a sus enemigos creyendo que entabla un tiroteo, o supuestos parecidos.

El autor, LESTER DENT, en
pose como de mirar hacia el
tenebroso futuro que se nos
avecina. Espera ver un 
salvador destello broncíneo
pese a todo en la negrura

La idea de ver al formidable coloso broncíneo con los bolsillos llenos de petardos, en plan BART SIMPSON, choca tremendamente con su estampa de atlético campeón graduado cum laude en no sé cuántas prestigiosas Universidades, varón casi sobrehumano que deja sin aliento a las impresionables féminas de su época y causa un secreto torrente de envidioso asombro a los hombres. ¡Y va por ahí tirando petardos!

Son rasgos de… ingenuidad que suelen impregnar sus pulps. Desconciertan, mas acabas aceptándolos porque entiendes que era como vendían su material en aquella época. ROBERT E. HOWARD lo hacía mediante el erotismo que contenían sus relatos de CONAN, como el indisimulado fetish barsoomiano descrito por E. R. BURROUGHS, rasgos me asombra pudieran publicarse en una época postvictoriana y en un recatado provincianismo como el estadounidense de ese tiempo. Doc parece no podía explotar ninguno de esos factores al estar ya ocupados. Enfocan a Doc a otro público: el juvenil. Era formador. Un amable instructor paciente que debía instruir a una generación de muchachos, de cuerpo fuerte y mente preparada, limpia y asexuada, o tanto como esto fuese posible, para enfrentarla al hombrecillo alemán del bigote cortado a lo CHAPLIN y su tremenda maquinaria bélica, operativa gracias a haber explotado un resentimiento colectivo nacional.

Esta vertiente formativa de Doc Savage está muy pronunciada. No la he encontrado en otros personajes. JOHN CARTER es, en el fondo, un combativo fanfarrón. TARZÁN se pierde en sus míticas junglas. CARSON NAPIER es escuálida copia de John Carter. LA SOMBRA preconfigura a BATMAN. BILL BARNES estaba en las nubes. Sobre Conan´nuff said. Eran batalladores que se limitaban a limpiar el corral de asesinos. Su ejemplo civil… es diferente. Mas el de Doc… debe inspirar. Instituir. Crear una Sociedad de genios que mantienen atlético su físico. Visto así… ¡Doc Savage era el ideal del ubermench nazi!

Y también sobre féminas audaces
escribía Dent. Discriminación:
mínima.nimia

Esta novela presenta, como en todas, dos presuntos malos. Pero ya sabes quién es, casi de entrada, por hábito. En La Campana Verde y su destructiva labor “sindicalista” (como si el sindicalismo fuese per se amenaza, en esta época del New Deal), hasta el último momento persiste la duda. Ágilmente relatada (obviando sus chirriantes “cuatro cositas”), mantiene la tensión y el suspense, exigiendo a Doc esfuerzos como pocas veces antes ha debido realizar. La última: escapar con vida (porque casi muere) de la guarida subterránea del villano enmascarado (otro clásico: el enmascarado, que no falte).