Afiche foráneo de un filme preconizador del respeto al medioambiente |
Durante la redacción de FACTORÍA CINCO tuve muy presente a este personaje y su película, inspirada en la novela MOUNTAIN MAN de VARDIS FISHER y el relato CROW KILLER de RAYMOND W. THORP y ROBERT BUNKER. No era tanto por los hermosos paisajes naturales con los que se ceba la fotografía del filme para darle mayor lustre a una trama en la que se advierten los “monotemas” de JOHN MILLIUS, coautor, junto a EDWARD ANHLAT, del guión (la alienación del héroe, su desconfianza crónica por la Sociedad, lo sucio e invasivo presente en la Civilización, la religión, más estigma que ayuda, el Hombre contra la Naturaleza, a la que acaba sometiéndose, la superación de un piélago de dificultades merced a una mezcla de fuerza y astucia, más instinto que inteligencia…), como lo que impulsa a alguien a querer cesar su vínculo con la Humanidad voluntariamente.
SYDNEY POLLACK rueda con brío, y una pizca de humor, este filme, en el que trata de sacar del apolíneo ROBERT REDFORD al hombre bestia que aquellos pagos exigen ser para poder llegar a mañana.
Aprendiendo del sabio BEARCLAW (WILL GEER), JEREMIAH JOHNSON podrá pasar éste y otros inviernos |
Lo que me resultaba sugerente de Jeremiah Johnson, insisto, era precisamente eso, qué hacía que un hombre como el que retrata Redford (vale, vale, lo sé, un sex symbol para atraer al público femenino; pero aceptemos que el histórico Johnson fuese así), de agradable apariencia y todas las trazas de triunfador nato en la Sociedad, huyera de ella, refugiándose en inhóspitos páramos.
Quizás era que la “garantía” de éxito que, en principio, podría extraer de la Civilización no era de buena laya, o tenía la intuición de que la prosperidad que podía obtener de ese modo sería tras lucha tan ardua que apenas compensara el colosal esfuerzo.
Junto al huérfano CALEB (JOSH ALBEE) Jeremiah hará una nueva amistad, DEL GUE (STEFAN GIERASCH) que no atraviesa su mejor momento (es el calvo enterrado) |
Tampoco Johnson asciende a la Montaña (entendida como un ente con aliento propio y normas inexcusables de cumplir, donde todo error se paga muy caro) buscando en su corazón riquezas. Encara al masivo adversario, que no rival, como una competición consigo mismo, esperando probarse ALGO que lo atañe exclusivamente.
Cuanto personaje encuentra en aquellas altas cumbres (aun el veleidoso DEL GUE -STEFAN GIERASCH-) no está allí para encontrar filones de metal precioso o joyas. Pretende vivir, tan sólo, en un entorno que puede romper la espalda de una altanera Civilización que mediante el vapor, la incipiente electricidad, los versículos bíblicos, se cree omnipotente.
Es precisamente esta jactancia la que acarrea los problemas que harán a Johnson figura histórica… y coprotagonista de parte de la saga de EL MUNDO DEL RÍO, de PHILIP JOSÉ FARMER. Aparece en EL FABULOSO BARCO FLUVIAL como uno más de los agentes de X, el ÉTICO RENEGADO.
Ternura en los inhóspitos pagos a cargo de SWAN (DELLE BOLTON) que demuestra sincero interés por el fosco Jeremiah |
La película está dividida en dos partes; la primera relata la llegada de Johnson a un puesto ribereño fronterizo con la Montaña, donde, tras equiparse, Jeremiah abandona los harapos de su vida “civil”. Hombre rudo y lacónico (cosa en la que la interpretación de Redford fracasa, porque se le ve forzado a tener una aspereza de carácter extraña a su ser), su primer contacto con la Naturaleza casi acaba con él durante el invierno. Si venía con ideas preconcebidas de que podía derrotar a la Montaña en virtud al color de su piel y un puñado de objetos de acero, las nieves enseguida le persuaden de lo contrario, mostrándole qué desamparado está.
De tanto llega a convencerle también un montañés con experiencia (otro misántropo), un cazador de osos llamado BEARCLAW (WILL GEER) que le iniciará en “los misterios de la montaña”. Johnson se percata que sólo podrá sobrevivir a la montaña si se somete a sus normas. Previa a él, seguirá allí cuando Johnson desaparezca. Asumido esto, su suerte empieza a mejorar.
Se acabó lo bueno: la Civilización hace su incursión en la vida del misántropo Johnson en la persona de este grupo |
Aparte de la Naturaleza, la Montaña tiene a los nativos como peligro accesorio, y a consecuencia de un ataque de éstos a un colono, el rudo Johnson se encarga de CALEB (JOSH ALBEE) y luego, de una esposa india, SWAN (DELLE BOLTON), que, andando el roce, demasiado tenue empero para limar del todo la tosquedad de Jeremiah, lo hará asentarse iniciando una forma de vida acorde con su carácter y el lugar donde reside. Johnson convive sin problemas con los indios en general; edifica su morada en el territorio de los peligrosos Crow. Aquí encuentra prosperidad y alegría, situado a medio camino del valle del que huye y la Montaña que le abastece. Pero aparece la Civilización y trastoca su existencia.
La Civilización la encarna un pelotón de Caballería que acude a él para que los guíe por los inhóspitos lares y puedan rescatar a una caravana de colonos sitiados por la nieve. En concreto, se focaliza en un clérigo que reprocha a Johnson su amancebamiento con Swan, india por ende. En ese breve lapso, se advierte por qué Johnson huyó del valle (la Civilización). Lo hizo porque la Sociedad lo invade todo, legislando aun el más mínimo-nimio ámbito del individuo. (Cosa que actualmente padecemos, pues ¿no han regulado hasta lo que los niños deben jugar durante el recreo?)
Estalla la guerra personal entre Jeremiah Johnson y los peligrosos Crow; él no debió atajar por su cementerio, ni ellos masacrar a su familia |
Para acelerar el rescate, Jeremiah decide cruzar, a regañadientes, un cementerio Crow, lo cual concita sus rápidas iras, y se vengan matando a Swan y Caleb. Así ponen fin al miniparaíso que él logró construir.
La segunda parte de la película comienza ahora y retrata su lucha contra los Crow, que envían un adversario tras otro para aniquilarle. Jeremiah se desbasta y repliega (o, acaso, va perdiendo capas), exhibiendo, para sobrevivir, una personalidad elemental, barbárica, sin ilusión ni esperanza, que no obstante lamenta todo cuanto perdió. Al fin, sin embargo, logra hacer la paz con los letales Crow.
El "segundo Johnson", corroído por el afán de venganza y la constante necesidad de cubrir sus espaldas, vuelve a reencontrarse que Del Gue; ¿adónde van? A ningún lugar |
Lo que omite la cinta es que Johnson devoraba hígados de los guerreros que abatía. Es obvio que este detalle vaciaría los cines, menoscabaría el atractivo de Redford para con las damas, y apartaría a Jeremiah (según Farmer, JOE JOHNSTON) de la CultuPop. Los héroes pueden tener coqueteos (nada más) con la homoX y el fetish masoca, (BATMAN y ROBIN), pero nunca ser caníbales. Jamás.
Las aventuras de Jeremiah Johnson está diseñada para contentar a un amplio delta de espectadores: a los que gusten de los grandes escenarios naturales, a los fans de Redford, y a los mal pensados que quieran ver dobles mensajes en todo acto o palabra del protagonista. Rodada en 1972 (como LONE WOLF AND CUB, cuya trama de lucha y acoso recuerda a la de esta cinta), posee vigor y la suficiente fuerza para resistir el ataque del tiempo con pocos problemas. No puede decirse tanto de THE MATRIX.
Vuestro Scriptor.