lunes, 3 de agosto de 2015

THE FLASH — SERIE 2014

Afiche. No se han buscado a un plusmarquista,
sino a un enclenque con pijama de freakie
Los tres primeros episodios no auguran continuidad al remake de la serie que nos emocionara a principios de Década 90, aprovechando el rebufo creado por el equívoco éxito del BATMAN de TIM BURTON.

Sin ambages: me parece pésima. No me gusta el arrogante elenco, el protagonista es un niñato que no contacta con el público (seguro que hay un tsunami de lectores dispuestos a contradecirme, resaltando un share brutal de estreno… que luego sin cesar va cayendo) y no me creo que GEOFF JOHNS, que tan a la cumbre llevó al personaje, firme estos guiones.

Detesto al nuevo BARRY ALLEN. Era más simpático el que caracterizara JOHN WESLEY SHIPP (aquí aparece, en papel secundario más maduro, y presidiario). Creaba química instantánea con el espectador. Te deja frío esta suerte de JUSTIN BIEBER de los superhéroes. Recuerda al cani niñato de la moto del barrio, y repele. No lo ves el genio CSI: Central City que constantemente afirman es.

Y luego, esta peña de apalancados consumiendo
valioso metraje de acción
Que haya un aparato SFX más espectacular que en la serie de DEMEO y BILSON es un punto a favor; que hayan atacado directamente con supervillanos, otro. Imagino que la digitalización ha abaratado los costes, permitiendo alardes que la serie de Década 90 sólo soñaba. Pero… ¿cómo de peligrosos son los supervillanos? Dos o tres aspavientos coléricos y la descafeinada soflama habitual estilo DR. DOOM no son cosa que deje honda impronta de la amenaza que presuntamente suponen.

Y aun siendo material DC COMICS… ¡qué referencia a TIERRA-X (de MARVEL COMICS) expresa! Copian la ingeniosa explicación que esa saga daba para conciliar los superpoderes (en el Bien o el Mal) con las personas comunes.

Buenoo. Las (odiosas) comparaciones. El montaje lo
dice todo. ¿Cómo hemos llegado a esta degradación?
Tampoco me gusta que haya una extensa sarta de secundarios ‘respaldando’ a este inmaduro The Flash (de traje rojo sangre de toro estilo armadura IRON MAN y barato cuero de motero macarra, no rojo fuerte, como el clásico.). Porque su número diluye (y entorpece, demora) la importancia del superhéroe.

Un superhéroe es un guerrero solitario, generalmente, con un sidekick, y alguna ayuda accidental externa. Es solitario para mostrarnos que la fuerza del Bien y sus rectas convicciones pueden derrotar gran marea de circunstancias adversas. Ejemplifica su individualismo solidario con el pueblo; fortalece el carácter. Un equipo de especialistas devorametraje y al que han debido crear grandes semblanzas dramáticas para justificar su presencia es eso: robarle importancia a The Flash.

Compitruenos en uniforme de freakie subido.
Esto sí es un
kick-ass en toda regla, macho
Me desagrada asimismo su juventud. Le resta seriedad. No te lo crees maduro para la empresa. Y para más inri: DC Comics se ha lanzado a la recreación imberbe de sus iconos (comenzó con SMALLVILLE) bajo una “oscuridad” CHRISTOPHER NOLAN que acabará estragando al personal.

Marvel, más bien, más mal, demuestra nuevamente saber sacarle delantera a la decana editorial en esto de los superhéroes, al presentar una gama luminosa de figuras (hay quien dice desenfadada) mas con una personalidad contrastable (he ahí el soberbio trabajo de ROBERT DOWNING, JR., como TONY STARK). 

Pues tienen que comer muchos huevos duros para
ponerse a la altura de la calidad de este profesional
Este The Flash imita el modelo GREEN ARROW (tampoco lo recomiendo, por muchas temporadas que lleve) porque al parecer ha funcionado. (No habla muy bien del criterio, o gusto, o madurez, de los seguidores de esa serie. ¡Por Dios, que es un tío con un arco!)

No. Pronostico breve vida a este remake. Es más: me ha hecho añorar al otro Flash, encontrando sus carencias entrañables.