Afiche: un hombre intenta impedir la absoluta anarquía |
Ha jugado con
las palabras para mostrarnos el enésimo día de servicio en Mega City 1 de
Dredd, expediente que abarca extenso delta de posibilidades. Nos recuerda que,
en esencia, Dredd es un policía, y ha explotado la baza de la investigación hard boiled, muy habitual en los cómics del
personaje creado por JOHN WARNER y CARLOS EZQUERRA. Y lo ha hecho confirmando
algo evidente en esas historietas: Judge
Dredd no es distópico: es la Distopía per
se.
Este DREDD pregunta antes de disparar; STALLONE, no |
Mega City 1
“arrancaba” sus “andanzas” como una prometedora joya de las futuristas urbes de
ciencia ficción. Gigantesca, era una Theleme mecanizada donde los ciudadanos
sólo tenían que entregarse al ocio y placeres varios sin preocupaciones. Poseía
elementos perturbadores que requerían un cuerpo policial fuerte para garantizar
la paz-y-prosperidad que, teóricamente, proporcionaba Mega City 1.
MA (LENA HEADEY), enemiga amiga de la hiperviolencia, baza a la que PETE TRAVIS apela para magnificar el filme |
El colmo de
la terrible situación de Mega City 1 es Resyk
(citado en esta película, y totalmente eludido en la deficiente de DANNY CANNON
—¿o SYLVESTER STALLONE?—): los cadáveres de los ciudadanos son convertidos en
alimento para los vivos. ¿Puede haber mayor ejemplo de qué antiutopía es Judge Dredd, miembro (pasivo) de una
civilización caníbal?
El dominio de Ma; posee 75000 potenciales asesinos |
La cadete CASSANDRA ANDERSON en poder de varios de ellos, y de la más sanguinaria ralea |
Estos JUECES corruptos evocan a los Jueces TENEBROSOS |
Urban encarna
a un hombre fosco y tenaz que se ha tomado como objetivo vital salvar Mega City
1 de sí misma. Sabe que es imposible. La entropía no sólo cunde: aumenta a
diario. Lo fácil es, por tanto, abandonar, como los cuatro Jueces corruptos que
intentan matarle a él y a la prometedora cadete mutante CASSANDRA ANDERSON
(OLIVIA THILBY). No. Dredd no se rinde. Antes muerto, dice su tatuaje. (Y Judge
LEX —LANGLEY KIRWOOD— [interesante detalle: ‘lex’: ley] casi lo consigue.)
Acabará
pereciendo (sabe) sin verse victorioso, pero la cuestión no es tanto ganar como
aguantar. Dredd tiene amor propio. Y resistirá aunque el piélago de
dificultades sea más abrumador que el planteado en el escenario del filme.
Eso no le invalida como persona; al contrario: lo realza. Demuestra coraje, constancia, fidelidad a un credo, a sí mismo. Lo fácil es buscarse excusas con fatuo tufo filosófico y dejarlo. Eso no hace a una persona, ni la dignifica: crea a un grosero saco de lloriqueos y pereza estéril, parasitaria.
Ma convertirá cuestión explosiva la supervivencia de Dredd |
Ma gobierna Peache Trees, y a sus setenta y cinco
mil ocupantes, con visceral violencia despótica. Ex prostituta, fabrica el
alucinógeno Slo Mo (¿slow-motion?), que ayuda a sobrellevar
la difícil cotidianeidad de Mega City 1, aprovechándose del limitado
poder/alcance de los Jueces.
Dredd no lo pondrá fácil; cuestión de amor propio |
Una sentencia que arriesga la existencia del megabloque |
Esta Mega
City 1, aunque no del todo fiel a la de los tebeos, juega a favor, empero, del
ambiente que Travis recrea: es temible, depauperada, frustrada, más que
fracasada. Es lamentable saber que Dredd,
pese a sus grandes aciertos, no haya funcionado en taquilla. Comprensible:
Dredd es muy ácido para la mayoría de los paladares. Y lo que plantea, nos es
tan corriente…
Otro día amanece; la batalla contra el crimen se reanuda |
Entre sus
virtudes consta el que este Dredd daría una paliza al BATMAN RISES sin problemas, lo cual es gratificante. Y tengo el
deleite de haber visto el insano ambiente de Recalibrados adaptado al cine, gracias a un personaje tan sólido
como Judge Dredd. Gran película, gran
adaptación, jugada completa.
Vuestro Scriptor.
También en: http://spnkgirl.blogspot.com.es/
Documentación adjunta: