viernes, 14 de febrero de 2020

EL DESTINO DE JÚPITER — DUNE FEMINISTA

Afiche. Tontada proadolescentes sin
médula alguna, con romance zoofílico,
presuntuosos "semidioses" y una absurda
pretensión femirula. Apañados vamos

La tentación de definirla “feminazi” es grande, empero incorrecta. Es basura. Fuerte el término, ¿eh? Mas acertado. Es costosísima nadería de una barroca fruslería de SFX que recaudó casi treinta millones de U$D más del coste de producción. Fracaso, pues.

En su momento, reseñe Dune como “el imperio matriarcal” pues había un entramado de mujeres con sugerentes poderes quasiJedi que “gestionaban” un vasto Imperio Galáctico regido por un Emperador tan titubeante como traicionero. Se dejaba aconsejar por estas brujas, que llevaban mezclando ADN desde Dios sabe cuándo, al tiempo que intentaba imponerse, no tanto por natural hombría, como por ser rey de un ancestral linaje.

Esas sacerdotisas “predictivas” estaban sin embargo aguardando naciera un Mesías que “trajera el equilibrio” a su Fuerza, lo cual lo descubro giro irónico en una de las “primeras ficciones pro-feministas” del género. Quien acaba partiendo el bacalao, la pana e impartiendo ley es un varón, no una vestal, por prodigiosa que pudiese ser (o esperarse).

[El que vale, vale; la que no, a hacer tarotismo en las sombras de las cortes galácticas.]

Ahí los tienes. La versión metrosexual de LOS ETERNOS de
JACK KIRBY en jactancioso superior. De nuevo, los (¿o
las?) WHASOSKY transforman a la Humanidad en un objeto.
En
THE MATRIX, baterías; aquí, cosméticos
Todo cuanto el incauto espectador va a ver (dejemos a un lado la considerable, llamativa y aparatosa bisutería visual; las computadoras hoy día lo pueden todo, al menos en ese campo; superan a la stop-motion del ayer, que aun así conseguía emocionarnos) es una bobada de romance inter-especies so pretexto de un terrible peligro que acecha a nuestro infortunado globo y el relente de una trama que mucho cuesta considerar creíble.

Tratan sin embargo de hacer parezca wunderbar! (¿con esa sarta de absurdos diálogos?) mediante el abuso de ambiguos términos o neologismos, una suerte de rituales creados por seres milenarios (de corazón cada rejuvenecimiento más cruel, endurecido) y la idea, a lo VON DANNIKEN, de que “los visitantes” no llegaron ayer, precisamente. Cuanto ves, a continuación, es Dune, un poco lo que filmaron, un mucho lo que FRANK HERBERT dejó escrito, describiendo una ostentosa y vasta arquitectura, naves de una complejidad mareante y vestuario bastante inspirado en el de los Atreides, por citar una Casa a voleo.

Me cuesta describir a esta pareja. Tiran de clichés (y chungos)
hasta producirte arcadas. El misterioso con pasado misterioso,
la abnegada currante, nuestro amor imposible... posible...
¿Hay más? El cuento ruso de la CENICIENTA. Una chica del servicio doméstico que, tras una ardua confusión-persecución, resulta ser, no te lo pierdas, al loro, la monarca de la Tierra. La Heredera; la KWISATZ HADERACH mas sin poderes. Un licantro guapetón-metrosexual descamisado-cazarrecompensas (donde esté LOBO…) antaño-supersoldado de elite, etc., se prenda de ella, ella del mutante de probeta, y emprenden una odisea espacial en la que, conociendo a unos cuantos atusados y altivos personajes engañosos, sádicos y conspiradores, así como varios encaretados haciendo de aliens, nos desembalan de qué va esta tontada pro-diversidad zoofíli-minista (excusa, empiezo a sospechar, para hacer esta película; no narrar una nueva ficción fantasiosa portentosa).

Esto es el fuerte de la peli; esta especie de DUNE siglo XXI
con SFX más elaborados. Este fotograma me recuerda a
Giedi Prime. Mucho evoca a la Baronía HARKONNEN en
esta cinta de la cual las feministas sacan pecho (en serio),
pese a su delexnable calidad
Porque Júpiter, la ‘eslava’ protagonista (y nada más. Es un “cameo” —ahora lo explico—; en casi nada contribuye a la derrota del Mal o salvar la Tierra) además es, al loro, no te lo pierdas, una “reencarnación” de una antigua reina pero que tampoco es la auténtica reencarnación. Tras milenios de tiradas genéticas al azar, los dados han rodado de modo que adquiera su semblanza, sólo eso, porque no posee (¿cómo podría, si sus remotísimos antepasados ni compartían sistema solar?) nada de su antiguo tronido o prestancia regia, o alma, o recuerdos, o poder; sólo el físico de alguien de cuando CONAN, o KULL.

Falaces combates, abundante maquinaria virtual/visual para imitar a LUCAS y STAR WARS, la enojosa impresión de tiempo perdido-tomadura de pelo que sufres al concluir el filme. En resumen: esto es que los otrora visionarios genios (¿ahora, “genias”?) de THE MATRIX ‘paren’ para contentar al Hollywood feminista-pro-diversidad sexual al rebaño de feministos garrulos zombificado y vocingleras feminazis hombrunas. Talento, arte, relato: ¡fuera! Lo políticamente feminista os ha defenestrado.