Ea, sirva esta antigua portada para ilustrar el artículo sobre un autor al sobrevenidos escrúpulos progres ha marcado para ser carnaza de la cultura de la cancelación |
…como el Imperio. El “racista”
SAX ROHMER deleita con otra aventura que, tengo cada vez más claro, en conjunto
son divertidas sátiras sutiles de las grandiosas gestas estilo INVANHOE
o aun los casos de SHERLOCK HOLMES. Rohmer creó un propio Universo “colonialista”
donde se desenvolvía con comodidad. Es lo que tienen los seriales chulos.
Algo que encomiarle a Rohmer es con qué honestidad
aborda al lector, a lo LESTER DENT o MAXWELL GRANT: lo que te vendo es una
novela de aventuras que no tiene más complejidad o trasfondo que el que quieras
darle. Pero tenlo claro: ni política, ni sexo, ni polémicas, existencialismos,
o tramas enrevesadas. OCIO. Te cobraré una pasta, me permitirá planear/publicar
nuevas entregas, y tú a cambio lo pasarás bien. Punto.
Aunque, en cierta línea, Rohmer, mediante
SHAN GREVILLE, narrador de esta secuela, afirma que Fu-Manchú es una amenaza
para la hegemonía del hombre blanco. Británico, claro. Es alusión demasiado
directa al imperialismo como para soslayarla… mas tampoco para empezar a
berrear histéricamente hasta desgañitarse, como esta era de fatuos
inclusivismos y catastrófico WOKE exige hacer a una saga de memos (de ambos
sexos) que persiguen así subvenciones estatales para vivir del cuento, no de su
esfuerzo.
Olvidan contemporizar con Rohmer, KIPLING,
CONAN DOYLE, o POE. Ven su obra bajo su fascista prisma arcoíris y demás
chorradas de la Isla de las Piruletas Multicolores, por la cual toooda
literatura previa a esta época es abominación hetereopatriarcal racista, BLABLABLÁ.
Mas… ¿había otra cosa? Esa fuerza componía la energía que movía el ancho mundo,
construía cosas, establecía los pilares de la Tierra que hoy día a estas “privilegiadas”
mentes llenas de forraje de bantha permite escribir sus ideológicas basuras
tendenciosas y sectario-censoras. Esta gente no está edificando nada que piense
perdurar más allá de
Un joven SAX ROHMER con pose de erudito y dispuesto a ganar una fortuna con FU-MANCHÜ... y luego dilapidarla |
(la Cúpula del Trueno)
un espasmo compulsivo que les hace ondear
las banderas de su deletérea progresía como si fuesen nuevos MICHAEL COLLINS por
las calles de Irlanda en 1921.
La hija de Fu-Manchú (FAH LO SUEE, también llamada, aunque
brujulea por ahí bajo pseudónimo) tiene una fuerte vertiente arqueológica, que
debería ser lo que pulsaba por entonces. Greville es un renacuajo de INDIANA
JONES (el que han aniquilado en la quinta WOKEntrega, acusándolo nada menos que
de machista tóxico) que trabaja para uno de esos eminentes y distraídos sabios
por completo imbuido en su labor en el Valle de los Reyes, buscando una
misteriosa cripta, etc., estando enamorado de la hija del jefe, que acaba
siendo otra víctima de la insidiosa Fah Lo Suee y demás mañas del Manchú y su
extensa red de hasasins dacoits y tal, que complican la vida a Greville,
al DR. PETRIE y, cómo no, ese estresante émulo de DOC SAVAGE que es SIR DENIS
NAYLAND SMITH. (En el ínterin, Fah Lo Suee secuestra a Greville, dándose el
lote con él de maneras que el joven ni imagina —mas sospecha—.)
Fotograma de la película basada en esta novela. Leo por ahí que Fu-Manchú, por su estructira "racista", no tiene porvenir cinematográfico ya. Ni literario, a este paso... |
Aunque creyéndole ido por la posta, Fu-Manchú ¡vive!, algo envejecido, para causarle terrores a la SRA. PETRIE, antigua mártir del siniestro sádico chino. Y reaparece porque, y este detalle es conspicuo, Fah Lo Suee manipula el SI-FAN, la organización del padre, para crear una mafia… ¡que apoye y colabore con el rampante comunismo que por el planeta está extendiéndose! Mientras redactaba este libro, Rohmer se percató de la Amenaza Roja, procurando denunciarla en estas páginas, escritas con su vituperado estilo, injustamente, por cierto. Era un estilo práctico. Viendo que eso compromete la pureza de la causa de Fu-Manchú (conquistar el orbe para sí, no para MAO TSE-TUNG o IOSIF STALIN), regresa, somete a su estúpida hija codiciosa y, vanidoso, se congratula ante Nayland Smith, de que esa alianza temporal haya sido tan provechosa. En este apartado, La hija de Fu-Manchú destaca por comprometida. Nada vacua es.