miércoles, 29 de septiembre de 2010

ACERTADO "PREFACIO" - SOLOMON KANE EN CELULOIDE

Uno de los afiches (quizás el más
espectacular) de la película
De la “panoplia” de personajes que ROBERT E. HOWARD ‘alumbró’ para ganarse un sueldo de otro modo que no fuese el habitual en su pueblo, Solomon Kane siempre me ha parecido extrañamente cautivador. Tanto CONAN como KULL son, en el fondo, culturistas desbocados con ambiciones monárquicas en entornos de extrema violencia y sombras sobrenaturales. Sus complejidades pueden aun resumirse como que muestran una sofisticación de sus necesidades básicas pasando luego a la habitual barrena de especulaciones de cierto cariz psicológico sobre que la longitud de sus espadas compensa no sé qué y tal. Bobadas. Era gente de “la ley de su época” y, por su hacha, gobernaban. No comprender esto sería tan absurdo como querer llevar hoy a Esparta ante un tribunal por infanticidio, pues así se regían y no les parecía cosa mala a los de entonces. (Pero con la oleada de estupidez que últimamente recorre Europa –un fantasma del que ni MARX [KARL] ni ENGEL escribieron nada-, igual la acusan.)
Portada del nº 1 de la colección, obra de
nuestro compatriota JESÚS MERINO,
del relato SOMBRAS ROJAS

Solicité, por tanto, parecer a un profundo conocedor de la obra de Howard que también se ha visto la película: MANUEL BARRERO. Es evidente que su sucinto apunte, que reproduzco a continuación, delata la presión que le impone su trabajo y la atención que dedica a  TEBEOSFERA, así como el tiempo que le roba su incipiente ‘salto’ a los medios de comunicación donde, como un CARL SAGAN de la divulgación de la historieta, da a conocer los logros y pretensiones de la mencionada web.
Pese a su brevedad, atentos que hay un par de aspectos de su opinión que atacan el problema y conducen nuestra atención hacia ciertas facetas que los autores de la cinta podrían haber considerado.
Según él, Solomon Kane, la película, es:
»Yo he leído toda la saga literaria y todas las historietas. Roy Thomas practica un acercamiento al personaje bastante respetuoso, yo diría que incluso modélico, aunque el plantel de dibujantes elegidos no me gustó, y tampoco me gustó que lo mezclaran con Drácula y tal, si bien es verdad que pudieron coincidir en el tiempo.

¿Imagen de un pecador que ahoga su
remordimiento en crímenes? 
»La película tiene un pase porque es una producción mínimamente cuidada, con una introducción interesante con eso de los mercenarios buscadores de reliquias y tal. Pero el personaje está desvirtuado. No es el de Howard y no resulta interesante. En una era de puritanismo los sentimientos religiosos vuelven a un hombre circunspecto y frío, apagado, pero este tipo de la peli parece un pequeño saltamontes con traje de chulo. Un Ghandi de barrio. Y no. Eso de dirigir el afán de venganza de un hombre en función de unos amiguitos que hizo en una acampada, o en virtud de que una chica le bordó un traje a la luz de las fogatas.... no cuela. Solomon era un tipo atormentado por la culpa, por los muchos muertos abatidos por él y las muchas muertes contempladas. Un tipo que huía, constantemente, lejos de su puritana Inglaterra, en busca de un nicho sin esa comezón culpable que sólo proporciona, como no, el catolicismo.
»Y qué decir de la escena de la crucifixión. Ridícula.
»Lo del monstruo del final está de más, pero a una peli de estas o le metes un monstruo o, previamente, tienes un buen guión. 
El monstruo de la polémica. Este salía en EL
SEÑOR DE LOS ANILLOS - LA COMUNIDAD DEL
ANILLO, ¿no?
»Cuando el director llegó a esa altura de la peli se dijo... "tengo que meter un monstruo, maldita sea". 
Quizás el monstruo que apareció por la producción fue… la propia película en sí.
Vosotros, ¿qué opináis? No estaría mal saber si acertamos o no sobre la elección de nuestros comentarios.
Vuestro Scriptor.