domingo, 4 de marzo de 2012

MEL GIBSON – COMETISTE VARIOS ERRORES

Afiche ruso de MAD MAX 2, EL
GUERRERO DE LA CARRETERA. El
páramo es más seguro que Hollywood
El tipo dista de ser un santo, desde luego. Y hace años que se orean sus ‘opiniones fuertes’ que ofenden a poderosos Lobbys de gran influencia (en especial, el homoX); pero lo que está padeciendo este actor últimamente es una infame crucifixión en toda regla; sufre los martirios del JESÚS de su controvertida y polémica LA PASIÓN. Gibson ha cometido diversos errores por los cuales ahora se lo están haciendo pagar, y caro.
Pero esto levanta la observación de que, ante todo, Gibson es un hombre con virtudes y vicios. Que tire la proverbial primera piedra el que esté libre de proverbiales pecados. Exaltan sus defectos procurando, a toda prisa, eliminar sus logros. ¿Acaso Gibson es un dios, un superhombre con un infalible equilibrio afectivo y moral, ético? Es alguien más, no una religión, o algo así. ¿Tanto cuesta entenderlo? ¿Tan adherido está a sus personajes de ficción que la gente es incapaz de apreciar la diferencia? ¿Qué esperan de él? ¿Que cure el cáncer (ah, no; el cáncer no necesita cura. Lo olvidaba)? ¿Que equilibre la economía mundial aportando una era de paz y prosperidad utópica a la Humanidad? ¿Es nuestro marco de referencia conductual?
LA PASIÓN. El reflexivo JESÚS (JAMES
CAVIEZEL) parece anticipar el martirio
que Gibson está sufriendo ahora a
manos de desalmados Lobbys
La cacería que padece, promovida en esencia por los medios liberales/de izquierdas (su especialidad, por cierto), hiede a retorcida, pérfida venganza. El rigor como le están agrediendo se lo excluyen a sujetos más disolutos que Gibson. Esos iscariotes han estado esperando agazapados a que tuviera un momento de debilidad y enajenación para brearle sin piedad. Puesto en la picota, lo han reducido a un harapo de carne, y esperan con impaciencia el momento de bailotear sobre su tumba.
Creo, Mel, que ahora contemplas con afecto el páramo y sus peligros, que asfaltan cada uno de sus kilómetros, porque, al menos, allí sabes quién está a tu favor y quién es el enemigo. Cuentas con la ventaja de defenderte sin tapujos, cosa que tus verdugos, que están barrenando hasta tu contribución al cine, no te permiten ahora.
Gibson ha cometido el error de ser un católico a ultranza (con ideas polémicas) en un Hollywood judeo/homo X. Ha tenido la osadía de hacer un Cristo ‘a tu manera’ que ha irritado a gente que debería haber agasajado. (Es la trampa en la que se cae cuando crees poseer “libertad de expresión/creación”.) Por La Pasión le llaman antisemita. Bueno, en las Escrituras consta que fueron los del Sanedrín (y acoto al Sanedrín, para que no me acusen también a mí de antisemita) los que pidieron a PONCIO PILATO la crucifixión de Jesús, y Pilato accedió por miedo a TIBERIO, que no era, desde luego, MR. SIMPATÍA CORDIAL. Este dato tus enemigos prefieren ocultarlo.
Profético título para su vida.
Esta otra arriesgada propuesta de
Gibson, saldada con éxito, no la
perdonan los envidiosos de Hollywood
El Lobby Judío al que ha ofendido, empero, no ve reprobable que GREENPEACE tache a quienes dudamos de que el cambio climático sea por causas antropogénicas exclusivamente de “negacionistas”, de gente que niega el HOLOCAUSTO. Reprender a tan selectos ecologistas sin duda les parece fascista. ¿No encuentran ofensivo que tal drama se emplee de arma, de insulto, para coartar una opinión contraria?
Luego, ha sido un triunfador en proyectos arriesgados. Luchó como WILLIAM WALLACE por propuestas que se han saldado con un considerable éxito, un respaldo popular, mientras trilladas producciones (políticamente correctas, eso sí) no recibían el aplauso esperado. Ha demostrado capacidad, sensibilidad y visión en tus filmes, y eso, aparte de cogerles por sorpresa (le tenían encasillado, y se ha salido de la línea), les ha molestado y mucho.
Es el momento de que haga un profundo acto de contrición y admitir que también, en su caída, ha aportado elementos que están alimentando a las alimañas que se ceban en su derrota. Por otra parte, no creo que algunos de esos escándalos pudiera evitarlos: es también humano y comete, como todos, errores. Pero sus fallos, está viendo, no son excusables. Y cuando escalamos en el tiempo estos escándalos, algunos podrían pasar por anecdóticos, no poseen la gravedad que les imputan tus enemigos.
Con la que le están dando los progres, ¿no va 
a estar  así de estartado este hombre?

Es bajo, vil, agredir a este actor tachándolo de demente, de poseer conducta bipolar, esperando así obtener el consenso para hacerle una lobotomía y rellenar los huecos con las mierdas progresistas/políticamente correctas al uso de esta Sociedad. Mel Gibson es reo de los neo-McCarthyanos liberales, que se están asegurando de que cuando le liquiden no quede el menor rastro suyo, sino un largo vestigio de vituperio.
Vuestro Scriptor.