En vista de que MAD MAX FURY ROAD va de catástrofe climática, ¿qué mejor imagen para sugerir influencia? |
Una feliz casualidad (tal vez) hizo que
leyera, sucesivamente, JUST
A PILGRIM y XENOZOIC TALES, el popular CADILLACS AND DINOSAURS. Fue acertado
hacerlo así, aunque pienso que, a la inversa, el efecto habría sido idéntico al
que quiero relatar.
La aspereza del relato gráfico creado por
GARTH ENNIS y CARLOS EZQUERRA sobre un intransigente personaje, duro como
aleación Moderan, que transitaba el fondo del Negro Atlántico, rescatando comunas
de supervivientes de despiadados Degolladores Motorizados, a quienes combatía ferozmente,
me cautivó enseguida. Lejos de crear una figura plana e inatacable, Ennis (junto
a lo sugerido por Ezquerra) dotó al PEREGRINO (sólo eso) de una personalidad
exótica que, a un tiempo, repelía y atraía.
El PEREGRINO no tolera tonterías... y lo excusa mentando al DIABLO |
Era el hombre que precisabas para ganar una
pelea, ajá, sí, y las de ANNO DOMINI
requerían un (anti)héroe sin entrañas. Se refugiaba detrás de la
(nociva)
lectura de la Biblia para justificar algunos de sus actos, y siempre tenía una
(puñetera)
cita bíblica para aleccionar o abreviar
disputas. El Peregrino obtenía la admiración de un chaval, BILLY SHEPPARD. Le
veía cuan epítome de la nobleza, la valentía, la entereza. Ejemplo a imitar
que, por supuesto, sus padres encontraban detestable.
Empezando porque el Peregrino tenía
antecedentes de canibalismo. (Este Ennis; qué retorcido.) ¿Quién quiere que su
hijo siga esos pasos? Pero en el Nuevo Mundo surgido de la Llamarada que volvió
estéril el ancho mundo no valían remilgos.
Elegante cubierta de un grupo de elegantes supervivientes "a lo Mad Max" |
Y quedaba eso ahí, para molienda en tus
sesos: los latentes escrúpulos morales de la Sociedad calcinada entre los
supervivientes y las brutales necesidades que surgían del Estrago Máximo que
secó los océanos. Un difícil DIFÍCIL equilibrio, sí.
Cadillacs
and Dinosaurs va de
supercataclismo y supervivientes empeñados en reiniciarlo todo, para más inri, asediados
por gigantescos lagartos prehistóricos. (Un “antepasado” de TERRA NOVA.) Su héroe es JACK TENREC,
enteradillo que pretende saberlas todas. Chamán ecologista, mantiene contacto
con unas criaturas “elementales” dispuestas a evitar que las cosas que otrora
lo desmandaron todo, causando el apoqueclipse, volvieran a repetirse. Tenrec,
aunque va de duro y todo eso, es
(plano y)
débil comparado con el Peregrino. No una
nenaza, pero es suerte de blando arquetipo de una figura heroica digna de
proceder de cuando FLASH GORDON, o
entonces. (MARK SCHULTZ, el autor, con su elegante línea, detallada y
naturalista, semeja un decantado de ALEX RAYMOND —aun FRANK FRAZZETA—, y su
obra —Xenozoic Tales—, esbozo de serial
que Raymond pensaba ejecutar, pero nunca llegó a iniciar.)
JACK TENREC sabe defenderse, sin duda, pero como el Peregrino... (El detallado dibujo, y soberbio entintado, evocan a ALEX RAYMOND y aun FRANK FRAZZETA, ¿verdad?) |
No hay abismo de tiempo o costumbres
socioculturales entre Schultz y Ennis. Sólo la dirección que su instinto
creador sigue, y sus vivencias. Ennis al parecer conoció lo más crudo del
activismo del I.R.A., y Schultz tuvo una formación apacible en un entorno
pacífico y controlado. (Luego estará lo que llevamos en los genes, torciéndonos
a la piedad o la maldad.) Y esto se refleja en sus obras. En sus protagonistas.
El Peregrino traslada esas experiencias
en su proceder de una forma que Ennis le ha impostado deliberada o
subconscientemente, y combate la adversidad con expeditiva crueldad. Tenrec se
desenvuelve en una Sociedad con dificultades que sin embargo ni frisa la visceralidad
del infierno de Ennis. En su mundo, no hay animales humanos salvajes, sólo codiciosos
con malos instintos. Muy rutinario. En el reseco páramo de Just a Pilgrim, Tenrec habría acabado cadáver pronto; empero, el
Peregrino habría dado guerra. Sería ese grano en el culo que todos odiarían, aunque
necesario para terminar vivos el día. (De Tenrec dicen algo así alguna vez;
pero cuesta creerlo.)
Estas obras son un ejercicio interesante
de comparación y verificación del resultado. De cómo nos moldean las
experiencias e influencias, el entorno. Tres autores sentados en un lugar reciben
la inspiración a la vez, y crean obras de distinto corte debido al cóctel
primero enunciado. Hay que ser completamente gilipollas para no querer
entenderlo.
Algo así sucede con estos tebeos: Ennis y
Schultz recibieron la iluminación, y
engendraron dos elementos distintos. Uno de ellos, de mucho cuidado. El otro,
de cuidarse. (Bueno, según el gusto de cada lector...)