El vehemente barriquismo colorista de SIMON BISLEY, en esta portada... |
De un ALAN
MOORE que ha hecho colosal al cómic a otros que, procedentes del medio (KEVIN
EASTMAN y SIMON BISLEY), y bajo estas siglas, sirven un insípido plato que desaprovecha
la grandeza de la historieta mas intentan especiarlo ampliando las sinuosidades
eróticas de la modelo JULIE STRAIN EASTMAN, ‘protagonista’ de esta cinta de animación,
y cuya presencia intentaba hacer “madura” y provocativa (cuan sigul de superior
calidad) una propuesta de evasión bastante inferior a lo que el arte promocional
prometía, decantado de extrema violencia absurda motivada por uno de los
Grandes Argumentos Narrativos: la venganza.
Ésta parece justificarlo todo. Esta vez,
los disparatados desmanes dibujados y animados que pretenden ganar nuestra
atención y una interesante recaudación que lucrara a los aventureros
Eastman/Bisley.
...queda considerablemente mermado ante las necesidades esquemáticas de una animación que resulte rentable |
No creo que, en $, F.A.K.K. 2 (¿fuck you,
quizás?) fuese óptimamente. Es un fantasioso malabarismo narrativo, ideados con
no sé cuánta improvisación, que conjuga elementos que, por su primitivismo, no
desarmonizan del todo. Recurren al misticismo, a cultos remotos paganos,
artefactos poderosos que otorgan poder cobrándoselo en cordura, a viajes estelares
que recuerdan otros ejemplos previos, tanto de las viñetas como del celuloide,
a bárbaros Mundos Exteriores donde la violencia desatada e insensata es recurso
válido, pues es la ley aquí… cohesionándolo en el citado erotismo de Julie
Strain para redondear la jugada.
Este oscilante andamiaje demuestra estar
locamente ensamblado y su aleatoriedad irrita el rigor de quienes se matan procurando
presentar una historia con la mayor coherencia posible como manifestación de
profesionalidad.
Así que mejor destaco las pinturas de promoción a sus fotogramas |
F.A.K.K.
2 comparte la (nefasta) suerte
de TYGRA, el fallido proyecto de BALSHI/FRAZETTA,
que, desde un lienzo fantabuloso de
pinturas y cautivadores bocetos (obra de Bisley, en este caso), luego flojea en
fotogramas; aun decae. Pierden la garra de la imagen fija que nos permite imaginar
pagos y hechos que luego no tienen efectivo reflejo en la pantalla. Y menos, al
nivel presenciado previamente.
Tampoco posee pretensión “aleccionadora”,
moraleja, F.A.K.K. 2. Puro
esparcimiento para adultos (bastante adolescentes, aún) que, sin embargo, pueden
encontrar mejores opciones a lo que “casi” cuenta esta animación en otras
cintas. F.A.K.K. 2, no obstante,
merece estar pues tiene la capacidad
de, sin ser genial, generarla. Sus ideas desaprovechadas provocan ser
recicladas, darlas mejor uso, en otro contexto y con otra protagonista. Y, por
sí, su existencia magnifica películas similares y mejor acabadas.
Pero, para dar contenido a la reseña,
digresión sobre la médula de F.A.K.K. 2.
JOHN FORD, el hombre que hacía westerns,
declaró que “la venganza prueba a su
ejecutor”. Palabras interesantes. Exigen ponderarse cuidadosamente.
Que cuentan de forma más espectacular esta venganza en áridos Mundos Exteriores barbáricos |
Es obvio que, frente al agravio o la
agresión, replicar es el instinto natural. ¡Venganza! Un millar de turbulentas
fantasías cruzan nuestros sesos, bullendo de ira. Desde la respuesta ‘inofensiva’
(“y tu puta madre”) a la salvajada: el gollete de botella rota retorcido en la
cara, el atropello, la paliza, sus cojones cortados en un vaso.
Pero henos aquí, dispuestos a ejecutar la
venganza. El odiado, ¡a tiro! En idóneas condiciones. De película. (Esto
también merece valorarse. El cine, la ficción en general, ha contribuido
notablemente a relativizar la violencia. Su efecto. Hace que la retribución parezca
un trámite quasiburocrático. Limpio. Esto
imposta en la mente del colectivo.) ¿Atacamos? O, en el último momento,
¿retrocedemos?
¿Dejamos a Dios (pues la venganza es
Suya), el karma, el golpe funesto? El problema es lo que late abrasadoramente en
las arterias. Quiere sangre ¡YA! Es genético.
Porque, de nuevo, un vistazo a los fotogramas sabotea ampliamente el esfuerzo de Bisley |
Pero… ¿y luego? O más propiamente: tu
condición moral ¿soportará la secuela? Has padecido una notable ruindad. El mismo
acto delata la infame condición del agresor. Su inclinación al Mal. Alguien que
procede así puede vivir sin remordimientos, pues la vileza es su verdadera
naturaleza.
¿Puedes tú? ¿Qué tormento íntimo produce
saber que has caído tan bajo? La venganza
prueba a su ejecutor. ¿Hasta dónde estás dispuesto a llegar; tienes la
constitución anímica capaz de realizarlo; soportar después posibles
remordimientos?
Empero hay venganzas y venganzas. Algunas
se suspenden por mor de ese último escrúpulo moral. Mantener la paz de
espíritu. Conservar el respeto ajeno. Se confía, quizás bien, quizás
neciamente, en que un Poder Sobrenatural Superior se encargará. Otras
venganzas, empero, son inexcusables. Tasado el daño recibido, entierras los
escrúpulos y actúas. Tal vez te sorprenda descubrir que puedes sobrellevarlo. Encuentras
un argumento irrebatible capaz de conciliarnos con nosotros mismos.
Plancha de la versión cómic. Aun supera a la animación |
La neumática protagonista de F.A.K.K. 2, llevada al extremo de agresión
intolerable al ser amado y su idílico planeta masacrado por el puto tarado
habitual de este tipo el relatos, no tiene problemas morales/mentales al proceder.
Asume su responsabilidad, derrochando balazos y cuchilladas. Transformada en
una Asinja belicosa, la andróctona
definitiva, arrostra los vesicantes peligros de mil Mundos Exteriores letales,
capaces de triturar al más despiadado guerrero, para cumplir lo jurado.
Esto resume
F.A.K.K. 2. Broncas, escenarios
‘exóticos’ alienígenas y un relente mínimo-nimio de ocurrencias/argumento. Precario riel por
donde circula un filme deleznable, notable únicamente por las soberbias
pinturas de Bisley destinadas a su publicidad.