viernes, 26 de junio de 2020

EL RACISMO ANTIKOMUNISTA DE H.G. WELLS, O LA SOCIEDAD FARENHEIT 451 — ¿CUÁNDO ACABARÁN TANTAS TONTERÍAS?

Instantánea de un maduro H.G. WELLS, al
cual cualquier día vemos en el potro de la
infamia erigido por los progres radicales

Vivimos procelosos tiempos. El fantasma de la fanática corrección político-oportunista, disfrazada de sobreprotector paternalismo imbécil, recorre el ancho mundo cortando Cortando CORTANDO con tremendas tijeras cuanto irrita sus falaces estándares socioculturales (tambaleantes, nebulosos, sin sustancia, capricho veleta que apunta acá-allá-acullá, según un menda con pinta de puntilloso NILES CRANE señale) y toma al espectador-lector por tonto integral del culo.

Repito el paradigma: la estúpida idea de HBO de anular de su oferta televisiva LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ tildándola de glorificación de la esclavitud. En algún suntuoso ático neoyorkino, un menda neoyorkino mau-maumizado, sintiéndose el profiláctico jabón del nacionalfeminismo/antirrábico-racista, vio la histórica cinta hallándola atrocidades sin cuento. No tuvo en cuenta, PARA NADA, el contexto histórico.

La Historia es, para estos mendas del resplandor (de STEPHEN KING) progresista, un AHORA continuo, en plan física cuántica, y personajes como esos esclavistas sureños deben juzgarse con estándares actuales, no de su época. Pues vamos listos el día que, a fondo, metan mano a la literatura. EDGAR ALLAN POE será de los primeros en arder en la hoguera del profiláctico racial/nacionalfeminista 451.

Macabra ilustración de EDGAR ALLAN
POE y su POEVERSO. Por su época, y
tal soplan los vientos, hará compañía a
Wells en cualquier momento
Nacido en esa cultura, describe un mundo visto con los ojos con los que creció. ¿Con prejuicios? Claro. Los de su momento. ¿Puede condenársele, por tanto, por eso? Pues, sí.

El ínclito alcalde de Londres (según TRUMP: un payaso —acertó, mira por dónde—) ha tildado a J.R.R. TOLKIEN de fascista. Por ¿qué? Últimamente largan el “fascista” a todo cuanto no sea nacionalfeminista, o progresivo. Ese tipo de mendas no lee. Regurgita “opiniones” de algún menda neoyorkino antirrábico-racial sin pararse a contextualizar, contemporizar, pensar, entender si el argumento que le fuerza a bautizar al autor de EL SEÑOR DE LOS ANILLOS de fascista es válido, o cagarruta. (PETER JACKSON ¿es otro facha, pues su trilogía podría considerarse glorificación del fascismo?)

¿No salían en la trilogía suficientes negros (perdón: afroamericanos, o afroafricanos)? ¿Es eso? Porque bien Tolkien refería que la obra era alegoría del nazismo, su expansión, influencia, amenaza para naciones. No decía: los muchachotes de Mordor, ¡qué tíos, qué uniformes de HUGO BOSS, cómo levantaban el brazo en envidiable rictus erectus de ¡aclamación! al FÜHRER!, sino lo contrario. ¿A qué, señor alcalde, espeta la palabra?

JULES VERNE, por si no lo sabían.
Al parecer, no tenía en gran estima
a las sufragistas ni a los judíos.
¿Qué? ¿Al saco, con los otros? ¿O
lo salva su extensa obra? No puede:
es de un machista
EL SEÑOR DE LAS DINAMOS, de H.G. Wells, visto así, no tiene desperdicio. Léanlo. Seguro enseguida habrá radicales antirrábicos-racistas dispuestos condenar a Wells al más radical racismo. Despreciarán su CV. Pro-abortista, pro-sufragista, fabianista (algo parecido al socialismo), pacifista. Acabó amargado al admitir que la educación podría salvar al Hombre, empero el Hombre no está dispuesto a dejarse educar.

Todo será obviado por esa masa de pretenciosos mendas. Sabemos cómo son, qué traza tienen. Los llaman también “perroflautas”. Merodea su desastrada pinta por los campus universitarios, despotrican contra algo, rabiosos republicanos nacionalfeministas, vagos por naturaleza aunque de candente labia, quieren cazar un apalancamiento subvencionado desde donde poder defender al obrero; léase: chalets de la Casta de la que abominan. Esas pirañas son jockeys de red social donde vierten todo su vesicante veneno de mierda según esperan la subvención apalancadora.

Para eso da su magín, y lanzar estereotipos flamígeros (“fascista, monárquico, golpista”) contra quienes no compartan su harapiento “modo de vida” o “inteligencia”. No bucean en la biografía de Wells, Poe, Tolkien. Vomitan algo oído a un líder también desastrado que, para nuestra desgracia, ha encontrado resonante hueco mediático.

RUDYAR KIMPLING, padre de la
política del
Sagrado Deber (hacer del mundo
Albión). Otro autor clásico que, por ser de
cuando era, debe desaparecer, ¿a qué sí?
Afinando, vemos más perversidad en la obra de Wells. LA MÁQUINA DEL TIEMPO, su exitosa primera novela, es alegato contra el komunismo. Cierto que, en algún pasaje, si no lo abraza, Wells coquetea con la causa. Mas profundicemos. Atentos.

La Humanidad la componen MORLOCKS (subterráneos, industriosos, feos) y ELOIS, bellos efebos áticos, parasitarios improductivos. Holgazanean por vastos jardines amansados de la otrora populosa Londres pétrea, flirteando y perdiendo el tiempo, madurando para alimentar Morlocks.

Wells considera komunistas a los veganos Eloi. Y les describe: inútiles. Incapaces de aprender o contestar preguntas. Sin ambición. Producir. Viven a expensas del capitalista Morlock. Exaspera su interminable indolencia al VIAJERO. Sólo vuelcan energía en goces hedonistas. Mas los Morlocks producen. Son los empresarios del 802.701. Tienen fábricas subterráneas. Por perfidia de ignoto origen, son antropófagos.

El análisis que estos elementos lanza es: el komunismo es estéril. Radicícola. (¡Malo, para los progres! Más motivo de excomunión.) La motriz fuerza productiva es Morlock. Resentido con las clases ricas de su tiempo, el autor les pinta deformes, de bajos apetitos (los del capitalismo salvaje-caníbal). Aunque los hermosos Elois… ¿construyen algo?

J.R.R. TOLKIEN. Le he considerado un
aburrido y pedante, pero ¿fascista? ¿En
base a qué? Por derivación, pues, todos
quienes gocen de
EL SEÑOR DE LOS
ANILLOS son... ¡hitlerianos natos!
Embroma al Viajero su belleza; un defecto racial hace les crea “los buenos”, negando que la fatigosa tarea recae en los Morlocks, quienes debieran recibir su simpatía. Pues, ¿no son obreros de su dura Sociedad y sus máquinas (así les mostró STEPHEN BAXTER), cuan borrador de las oprimidas clases trabajadoras de METRÓPOLIS? Obtienen magro beneficio, pese a ser los aparentes amos del mundo.

Kritica al Komunismo Wells al dibujarlo como Eloi. Consciente o subconscientemente, lo hace. Así que, cuando la oleada de neopuritanismo antirrábico-racista repare en estos datos, vilipendiarán a Wells. Como a VERNE, un machista, o RUDYARD KIPLING, declarado imperialista, como CONAN DOYLE, cuyo misógino SHERLOCK HOLMES será tan maldito, y acosado, como RHETT BUTLER o SCARLET O´HARA, en estos tiempos de quienes quieren acabar con los prejuicios. Mas durante la embestida, están creando otros nuevos, alentados por sus vacuas veleidosas “morales”.