DEREK LAUFMAN visualiza así a HELLBOY |
Según las tareas promocionales de SOGUETTO
prosiguen a buen ritmo, con la fecha de su presentación muy próxima, y
esperando recuperar el habitual pulso de este blog, con los comentarios
usuales, aporto esta apreciación sobre material recientemente hallado. No sólo
la faceta literaria sigue cultivándose; la gráfica no puedo descuidarla. Con
firmeza. Internet proporciona un vasto campo referencial que tanto ayuda a tu
maduración como a eludir aquellos aspectos que podrían señalarte, con simple
llaneza, de copista. Y peor aún: sin escrúpulos.
Entre esos ‘paseos’ voy y doy con un
dibujante extranjero, DEREK Laufman, cuyo estilo, no voy a decir que sea único
(creo que sus orígenes son nipones) me recuerda al de nuestro ENRIQUE V. Vegas vivamente,
y quien en otro lugar he vertido ditirambos sobre su línea gráfica. Esos ‘cabezones’
tan adorables, que tienen algo de muñeco de felpa JIM HENSON, e ilustran una
amable parodia de conocidos filmes.
Pero comparando sus dibujos, qué similares
son las líneas… ¿estamos ante un caso de mimetismo, copia, casualidad? Pienso
que son autores que trabajan de un modo muy similar, por completo ignorados el
uno de la labor del otro, y que se han encontrado en un punto del tiempo y la
Historia que permite sospechar que se están copiando. No sé hasta qué extremo,
empero, la copia puede ser, en sí, un homenaje. El reconocimiento de una
impotencia creativa que, para expresarse, debe aferrarse a algo ya existente.
ERINQUE V. VEGAS visualiza así a Hellboy. ¿A que las similitudes entrambos dibujos inducen las sospecha vertidas en el comentario? |
Veámoslo así: un tío tiene una idea. Descubre
a un autor determinado. Le gusta su línea, que aplica a su inspiración. La
distancia (así como el ámbito editorial donde publican —no tiene la misma
pujanza internacional MARVEL COMICS
que DOLMEN EDITORIAL—) ofrece la
abrigadora manta de suponer que, de nada, se conocen. Independientemente
concluyen sus páginas bendecidas por su característico estilo. Esto pasa con
más frecuencia de lo que muchos piensan.
¡Pero está internet (repito) ofreciendo
un ejemplo que permite sospechar! Y siempre hay alguien tan suspicaz y/o
quisquilloso como para perder parte del domingo escribiendo una parrafada que,
espera, sea seguida masivamente por sus lectores. Mantengo mi criterio de que,
en nada, uno u otro se han “visto” antes. Eso: sus líneas han colisionado, por
accidente, en este ahora específico… dándome algún material especulativo para
actualizar el blog.