Afiche; a destacar ese villano con su calibre de dos cañones. Ya empezaba a avisarte que esto pintaba mal.. |
Cuanto sé del sujeto es lo visto en DRAGÓN, VIDA DE BRUCE LEE. Que, al
parecer, fue su secundario el que lanzó a la fama al fibroso karateka asiático,
y poco más. Sé, incluso, que era para TV, en aquellos tiempos de LOS VENGADORES (no los MARVEL), EL PRISIONERO, U.F.O. o LOS INTOCABLES. No sé quién lo creó, por
qué, y me ha dado franca pereza buscarlo en Google.
Sí sé que este filme, excéntrico-desmesurado
y descolocado, recaudó doscientos millones largos de dólares de una inversión
de ciento veinte. O sea: FRACASO. Porque si mal no recuerdo, LOGAN
invirtió noventa y recaudó más de seiscientos, o así. Negocio redondo. ¿Motivos
del fiasco? El vaivén que sufre la cinta.
Una que llevaba coleando desde Dios sabe
cuándo por los estudios. Hasta KEVIN SMITH preparó algún libreto para adaptarlo
a la pantalla de plata. No prosperó. Mas SETH ROGEN se hace cargo del asunto y
presenta una especie de ARMA LETAL
con tipos con antifaces donde las bromas, el drama y la acción padecen tal acrobática
acracia que no puedes decantarte por definir qué estás viendo: ¿DANKO, una comedia, una de acción con
fuertes dosis de humor, un drama de humor negro a mansalva, qué?
Porque aunque hay una idea brillante en el
arranque de todos estos descalabros, cuando el prota (un fiestero niño-bien bont vivant que, ante la pérdida del conservador
e industrioso padre —dueño de uno de los últimos rotativos independientes e
incorruptibles [en apariencia]—) decide combatir el crimen motu proprio, sin que medie el gran GRAN drama clásico de tales
personajes (¡venganza, mataron a papá!), lo hace como una irreflexiva locura
más de alguien aburrido, harto millones, que precisa orientar/dar sentido a su
muelle vida, en una búsqueda casi desesperada de endorfinas y adrenalina a
raudales, luego el decurso de la narración visual se desnorta. Y encuentra a alguien que le sigue el juego, sin pararse a pensar en las terribles consecuencias ulteriores, pese a parecer más sensato (de entrada).
Todo esto obliga a preguntar: ¿es comedia, es
acción-comedia, es…? ¿Qué? El AVISPÓN VERDE es un fanfarrón presuntuoso con un
antifaz de LONE RANGER que sobrevive a los peligrosos apuros donde se mete de impulsiva
forma loca, en su afán de obtener el subidón supremo, gracias a KATO, el
moderno Bruce Lee, tipo frío, cerebral-disciplinado, con deslumbrante habilidad
para los artefactos y los coches molones que transforma en arsenales rodantes y
apabulla cuando reparte estopa. Es el contrapunto, aun contrapeso, de un rico
irresponsable y eterno PETER PAN al que sobremanera le cuesta pasar de la
pubertad a la adolescencia.
Claro, que el otro enmascarado en funciòn de compinche no puede tampoco presumir de prudencia o inteligencia. No sé lo que tienen las caretas, que deshiniben de mala manera |
El malo… se defiende, aunque siga siendo un
estereotipo estilo Arma letal o
cualquier ruso mafioso (no JOHN WICK)
con cierto empaque al que, por repentino delirio, se le sube a la cabeza la
transfiguración de las máscaras (véase MARSHAL
LAW) y pretende darse todavía más notoriedad poniéndose una capa roja, mutando
incluso su nombre para, de este modo, con ese toque de teatral truculencia,
convertirse en la irresistible e irrebatible fuerza hampona definitiva de Los
Ángeles.
La verdad: ignoro qué hace esta señora en esta película. Porque su actuación... |
CAMERON DÍAZ ignoro qué hace en la película. No es la de GANGS OF NEW YORK
ni de coña. Otra actriz con menos caché pero buena preparación, una secundaria
afable, podía hacer su interpretación: la de hacendosa tía buena cualificada suma cum laude que acaba embridando al
díscolo jefe que, con fines sexuales, se la disputa con Kato, el fenómeno de la
mecánica y los guantazos.
Puede que el personaje per se tampoco diese para más, fuese un mínimo-nimio, empero sospecho que sí, ajá: prometía. Con
otro equipo (no el de un cómico pretencioso), un poco más serio/profesional,
podríamos habernos llevado una grata sorpresa. Una franquicia estilo DEADPOOL,
irreverente a quien, sin embargo, ni de lejos este Green Hornet pica… ni con la punta del aguijón.