No sé dónde LucasBooks busca a estos escritores, empero elogio la habilidad de
JAMES LUCENO al “completar” en estos “episodios apócrifos” aquello que luego
vemos “resumido” como diálogo en la pantalla de plata. De momento, in albis de esta marejada de libros a la
sombra de lo que tomas el corpus colossus
central, o sea, los filmes, esos nombres o anécdotas se suponen sucesos
inevitables de contienda tan vasta, de tan múltiples escenarios, como la que destruye
la República Galáctica, muy menoscabada por los arteros ataques del (supuestamente)
“desconocido” LORD DEL SITH.
¿Qué proceso de selección sigue LucasBooks, o quien sea, para escoger a
estos autores? ¿Son amigos del amigo del amigo? ¿Han hecho una oposición
secreta; les recomiendan editores? ¿Hay una mafia, o timba, a la que te apuntas
(siempre por méritos que ignoro) y recibes luego el encargo de completar
lagunas, o aportar material? ¿Cómo es?
[Planteo
ahora si LucasBooks no tiene in
mente pedirle a firmas poderosas,
reputadas, por ejemplo a STEPHEN KING (¡aclamad al autor!), MICHAEL MOORCOCK
(¡alabad al escritor!), o semejantes, imposten algo a la considerable
literatura, escrita o ilustrada, que ya existe. Seguro que estos dos narradores
desearían colaborar. Podrían presentar algún trabajo (espero competente, porque
vaya decepción me supuso BAD BOY) que
les reinmortalizase. Pienso que hasta les vendría bien, porque habiendo tanta
ignorancia en cierto delta del freakismo,
muchos de esos cabezas huecas que sólo viven/respiran/piensan en STAR WARS (aunque peores son los trekkies), podrían descubrir a King o Moorcock. Supondría
una tremenda sorpresa, así como a ellos dos, nuevos lectores aficionados a su
producción.]
JAMES LUCENO haciéndose un poco "el interesante". Ha aportado palabras a la Doble Santa Trilogía. Quizás algunas de sus propuestas hatyn tenido reflejo en el cine. Qué potra, tío |
Luceno enlaza, con esta novela donde
prioriza la figura de ANAKIN SKYWALKER, losEpisodios
II y III. Se permite, cosa que me
sorprendió, dar su “opinión” sobre ciertos temas y ahondar en la psique de los
personajes principales. Desvela qué mecanismos terminan corrompiendo del
todo/completamente al presunto Elegido, quien traería el Equilibrio a la Fuerza;
esta pudrición llega tanto del turbulento interior de Anakin (un liberto, vejación que le marca y quema
hondo, como la pérdida de su madre), quien crece tanto en poder como en
soberbia, más la manipulación astuta, sibilina, de PALPATINE, con sus elogios inyectados
con una lenta aunque implacable toxina, más la misma guerra, destructora de
principios morales y leyes.
Luceno cuenta que aun en YODA hay Reverso
Tenebroso; dibuja a la Orden Jedi sectaria, acartonada, miope, asustada de su
inmenso poder (podrían ser a lo que los Sith aspiran), lo cual engendra en ellos
suerte de pequeña/secreta simiente del Reverso Tenebroso al que quieren
extinguir. Para parar la arrogancia que inunda a la Orden, Yoda propone una
sumisión a la humildad y la anulación del ego. Inadmisible para Anakin,
ensoberbecido por sus enormes talentos, y más endiosado por ser el Elegido. ¿No
derrocha facultades que Palpatine sin parar elogia y ¡ensalza!?
Lo dicho: otra de sus aportaciones. Y no parecen contribuciones "paralelas", un STAR WARS "adjunto", sino que tienen reflejo en "el canon" oficial |
Figura curiosa es OBI WAN KENOBI. Mientras Luceno
de Anakin hace profundo retrato, Kenobi semeja convidado de piedra. Es
perfecto. PERCEVAL. Digno caballero, sin pasiones, aspiraciones, todo lealtad y
código. Si rasgaras a Kenobi, dentro no verías nada. Hueco. Es máquina de
emitir filosofías más/menos juiciosas. Punto. Imagen de la honradez y la
lucidez, sin alma empero. Puro estereotipo de la virtud.
Mientras en la Trilogía Clásica a modo recreaban el Mito Artúrico, GEORGE LUCAS
manifiesta inquietudes políticas en la segunda tanda. Explora las maneras
retorcidas, fraudulentas, como los totalitarismos abaten las decadentes democracias
infantilizadas. Cuestiones como el lenguaje inclusivo, la diversidad, los micromachismos,
tienen más importancia que mantener robusto el árbol de la libertad, o resolver
los problemas concretos/serios, no las chuminadas esnobistas.
Luceno comparte esta preocupación, como refleja
el libro. Induce a reflexionar sobre nuestra actualidad y lo que comenta en ciertos párrafos. Ves turbadores
paralelismos, comprendiendo por qué esos totalitarismos ganan impulso en una
Sociedad anestesiada por las consignas rimbombantes y el efecto de los hueros aspavientos “progresistas”.