jueves, 12 de octubre de 2023

DÍA DE LA HISPANIDAD, 2023 — LOS NAZIONALISMOS XENÓFOBOS, ¿SEGUIRÁN PERMITIENDO SE CELEBRE?

 

Cuando ROBERT GRAVES,
educado en la Leyenda Negra,
refiere la gesta, con sus luces
y sombras, debe entenderse, en
el fondo, como un admirativo
reconocimiento. Hacerlo en esta
España Progresista actual, de parte
de autores "patrios", es impensable

España no se rompe… ¡porque ya está rota! Queda su atomización, eso sí. Por mor de su vírica supervivencia, el comunismo gobernante configura nuestra nación como un gulag de ciudadanos de primera (nazionalistas xenófobos) y purriosos de segunda: llamados españoles. Y, a éstos, les parece BIEN.

La insidia comunista, bajo un falso eslógan de “progresismo”, o “mejora de nuestras condiciones”, socava con barrena implacable las estructuras de la nación, donde sólo los más vehementes, terroristas e inmorales sacarán provecho. El resto, víctimas de “la centralidad” (propulsada por esta asquerosa e inane Derecha autocomplaciente, beata, meapilas —valga la redundancia—, acomplejada con sus mismos principios ideológicos, inoperante e incapaz por completo de defender al país y su unidad), se enzarzará en la disputa no ya de limosnas, sino de migajas que arrojen los criminales nazionalismos excluyentes y racistas para divertirse con el cainita espectáculo.

Como atribuyen a JOHN LOCKE: Peor que un mal gobernante, es el pueblo que le tolera… o le escoge en plebiscito, añado yo. Al español le duele demasiado adoptar una postura moral y ética, no sea le llamen facha. Vale, nadie pide levantar barricadas y todo eso; sólo que comprendas que el dinero que necesitarán tus hospitales, tus carreteras, tus servicios sociales en general, lo regalan a terroristas y xenófobos nazionalistas. Naturalmente, tú, ciudadano-planta, que sientes pero no reaccionas, tú, ciudadano-pez, de memoria de tres segundos, ante la escalada de kanalladas, preferirás culpar al que menos culpa tiene de un problema TUYO. La típica actitud del matón escolar.

No toca este Día de la Hispanidad celebrar las grandes gestas posteriores a la arribada de CRISTÓBAL COLÓN a las Américas (porque es de fascistas). De que si cruzamos la tenebrosa Mar Océana en todos los puntos del compás y acabamos descubriendo Australia (sí, Australia estaba allí, como Perú, mas para lo que era la limitada noción global que tenían en Europa, este descubrimiento ampliaba aún más Más MÁS los mapas, llenos de inmensas lagunas en bianco) y plantamos gallardos nuestra bandera en lo que hoy día es Seattle, y si me apuran, Vancouver, Canadá.

Toca hablar de LO MÁS URGENTE: la salud moral de nuestra nación, unidad histórica y lingüística. Parlotean en el Parlamento, donde debiéramos todos entendernos a fin de conseguir conceso que mejore nuestras vidas, cavernarias jergas inhumanas para entorpecer aún más, con la INCOMPRENSIÓN, la resolución de los problemas. ¿No PERSIGUEN en su cuna una lengua hablada en todo el orbe por más de quinientos millones de personas? Supone agresión segura hablar español (eso que esnobs cursis llaman “castellano”) en ciertas partes de España. Y se acepta. Con naturalidad.

La metáfora que llega del pasado;
hay gente así de visionaria. El del
suelo, España y sus habitantes; el
tanque: EL GOBIERNO ACTUAL.
Una amenaza REAL en ciernes

Estos días consolidan una opresiva dictadura de izquierdas totalitaria que implantará pronto sus inevitables derivadas: la persecución, el encarcelamiento, la ejecución, del crítico o disidente. Estos tiranos, embaucadores “progresistas”, emplean corrosivos medios hostiles (redes sociales, sicarios parlamentarios, Tribunal Constitucional —!—) para garantizar su victoria, facilitada por la feble Derecha, más empeñada en que les vean en misa y buscando “la centralidad” que en combatir con firmeza esta amenaza.

¡Triste balance para una jornada que ha arrojado al populux, más escandalizado con el "sexismo" de las cajas de juguetes que con la merma de sus derechos, con a un puente donde prefiere ignorar que sus derechos están siendo masacrados… en nombre del “progreso”! Tarde llegará el inútil lamento. Los comunistas gobernantes nos están acostumbrando a la pobreza para, cuando llegue la miseria que les caracteriza, nos parezca idílica la pobreza.

¡Y a esto lo llaman democracia!