Afiche promocionando ¡nada menos! que la ¡¡tercera!! temporada. Esa imagen del eclipse es muy descriptiva de la serie, ¡¡¡sí!!! |
Además, tebeos, camisetas, DVDs, pulseritas… todo un jugoso merchandising manaría de la propuesta, enfriando la fiebre del fan compulsivo/coleccionista así exaltado. Mas, como un moderno parto de los montes, Heroes resultó un falso y fatuo producto decepcionante, fiasco únicamente magno por su huera ampulosidad.
Otra imagen promocional que reúne a lo más 'granado' del elenco. ¡El jodío chinorris, ¡cómo no!, dando la nota! (Menuda panda de incompetentes) |
Pintura de ALEX ROSS, puesto al servicio de la mediocridad. Trabajo alimenticio total, ¿verdad? |
Por desgracia, sus insípidas temporadas miméticas castraron la venturosa idea (porque, seamos francos, a Kring, Loeb y Fuller se la refanfinfla como a CANTINFLAS; ellos cobraban un sueldazo pasara lo que pasase), quedándose todo en una ineficaz repetición de las dudas y cuitas de los personajes, que una vez y otra eran presentados, ampliando un poquito más sus poderes o circunstancias para que el capítulo cinco de la segunda temporada no fuese idéntico al cuarto de la primera. Por otra parte, el dramatis personae (¡oh, cómo ODIABA al gafotas amarillo!) tampoco concitaba estima suficiente como para quererles coleccionar, digamos, o sentir empatía por ellos pese a las amenazas que les atacaban.
JOHN WESLEY SHIPP como THE FLASH. ¡Esto sí era una teleserie de superhéroes! |
Y esperando darle médula a un metraje excesivo (¡veinticuatro plúmbeos episodios de cuarenta y dos minutos de duración, tan sólo en la primera —que debió ser última— temporada, en los que veíamos supertipejos blandiendo sus superhabilidades de cartón piedra, racionadas en exhibiciones de veinte segundos, o menos aún, mientras previamente nos habían aburrido con diálogos absurdos, acosados por una BSO que anticipaba hecatombes que jamás se producían después!), entremezclaron la urdimbre de Heroes con la de X-FILES, esperando quizás así rebañar para la saga a los nostálgicos de las andanzas de FOX MULDER y DANA SCULLY. Otro fallido intento.
Cartel de TAN MUERTOS COMO YO, sardónica, satírica, nihilista, genial. De BRIAN FULLER, vinculado a HEROES, creí que respetaría su calidad. Qué va |
Otro aspecto de la serie está en que se la encuadró en la aclamada “TV de alta intensidad”, alimentada por sagas como THE SOPRANOS, DEADWOOD, THE SHIELD o ROMA, espectáculos que habían demostrado qué poco convencionales eran comparados con LA HORA DE BILL COSBY, por citar una. Otro lamentable malentendido. Heroes aspiraba a eso, es honesto admitirlo, aunque jamás persiguió esa ambición. Fue un juguete que calmó ciertas vanidades personales, y cuando se estropeó, se opacó su lustre, quedó desechado.
Tétrico afiche de AL MARGEN DE LA LEY. Aseguraban que Heroes estaba en la línea de las teleseries de esta potencia. (Jaja-ja) |
Heroes mostró un elenco que parecía aun cohibido interpretando sus roles, mermando por tanto la eficacia del personaje que encarnaban, restándole puntos a una trama que pedía a gritos un segundo (o tercer) supervillano “de campo”, que ayudara a rellenar las extensas lagunas creativas que poblaban la serie, a la que no pudo faltar, como fetiche indispensable, el cameo de STAN LEE. Desde luego, EL HOMBRE se apunta a un bombardeo, mientras haya viñetas en él.
La presunta "puesta de largo" de Heroes. Este filme se limitó a duplicar sus defectos, desaprovechando sus virtudes, o de las de películas similares |
Y todo porque esta serie confirmó la condición de niñatos veleidosos, tipo IMAGE, llenos de ínfulas y escaso talento, de Kring y Loeb, a quien su dilatada experiencia de poco le ha servido esta vez.
Vuestro Scriptor.
De superhéroes de verdad:
http://unahistoriadelafrontera.blogspot.com.es/2010/12/iron-man-2-lets-dance.html