viernes, 22 de marzo de 2019

ROBERT A. HEINLEIN/CHINA MIÉVILLE: COMPARATIVA — O ¿POR QUÉ UNOS PUEDEN EXPRESARSE COMO QUIERAN Y OTROS DEBEN CALLAR?

De PREMIO HUGO a  panfleto militarista
y machista (todo se andará) decidido
por una Ixquierda ignorante cargada
de prejuicios fanáticos

[Caveat lector: es justo reconozca que parte de este comentario se efectúa sobre rumores que pudieran ser tendenciosos.]

La conocida historia es vieja; a Heinlein, Gran Maestre de la Ciencia Ficción (algo así como el Papa del género), alguien hace años le echó el baldón contaminante de ser un fascista (al parecer, por un comentario sobre la mili, y dos novelas, una la de TROPAS DEL ESPACIO) y el bulo prosperó. Creo que esto sucedió a comienzos de Década Setenta, cuando las convulsiones sociales hippies que han ido cambiando el ancho mundo, se esperaba que para mejor, aunque en lo más importante seguimos más o menos estancados. Hay algún progreso. Mas, por desgracia, hasta eso está siendo arteramente podrido por ideologías indeseables antagónicas a lo que, dicen, Heinlein representaba: la Derecha Clerical Atlantista Monárquica Capitalista Militarista Colonial, suerte de sombra de la inteligencia, la moral, los derechos, la pluridad/diversidad, que pretende encadenar a la Humanidad en las mazmorras de Mordor in saeculae saculorum, amén.

Heinlein, apenas le tildan de lo que no es, pierde entero el derecho no sólo a publicar, sino a expresarse. Y quienes le PROHÍBEN este derecho, considerado universal y que debe beneficiar y bendecir al colectivo sin discriminación, resulta ser la Xtrema Ixquierda Populista Libertaria Transgénero Feminista Republicana que siempre anda con campartas y pancartas abollando cacerolas exigiendo Exigiendo EXIGIENDO a las autoridades (de Derechas) que la libertad (como la de expresión y/o creación) sea libre, universal, sin discriminaciones… siempre y cuando el autor sea “uno de los nuestros”.

Un libro aburrido y pretencioso que
posee esos galardones sólo porque el
criterio de los jurados se ha atontado.
En todo caso, y siempre a tenor de
ciertas afirmaciones que pudieran ser
sesgadas, lo que cuenta es que la
ideología del autor es la IN, en tanto
la de HEINLEIN es la OUT
Meter la política (un sucio invento, PEPPONE dixit) militante en la ciencia ficción es malo, mas peor es segregar por las creencias personales que, se supone, son sagradas. Puedes (ahora, obligan a) creer en el transgenerismo femimarichulerista republicano y que los emigrantes campen por donde quieran sin contribuir en nada, que para eso hay sesenta mil idiotas mal pagados cotizando como cabrones para mantenerlos. Eso, es del todo/completamente aceptable, maravilloso, en absoluto criticable. Humanista. Podría Heinlein poner sensatos reparos a un buen puñado de estos aborrecibles buenismos que se han transformado, no sólo en mandamientos, sino en armas de discriminación masiva empuñadas contra la parte de la Sociedad que mira, ceñuda, todos esos aberrantes excesos dialécticos populista gestando reacción.

China Miéville (un escritor aburrido, todo el mundo me afirma) supone el opuesto de lo que “defiende” Heinlein. Es progre. Es avanzado. Es transgenerista femimarichulerista-pro-migrante republicano. Pongamos, ¿de acuerdo? Invitado a una ComicCom, disparata cuanto desee contra el Capital Atlantista Monárquico Clerical Colonialista… ¡y sale cuan torero, sobre hombros de enfebrecidos lectores, y bajo palio si se tercia! Heinlein debe huir por la puerta trasera, que toda esa masa de pelucas moradas pro-marichulería (léase: AEFCFT) desean lincharlo por hablar bien del servicio militar, algo despreciable, retrógrado, machista fuerza de opresión de los ricos, como la policía… hasta que los necesitamos, para defender el chalet de la Casta del líder plutoproletario bocazas.

Linda instantánea donde vemos miembros y simpatizantes
de la AEFCFT quemando aquella literatura que consideran
conservadora, machista, militarista... Puro
SOGUETTO, vaya
Entre las notables infamias que arrastra la Ixquierda está el haber robado, al Colectivo, a la Humanidad, crear en libertad y a hacerlo en virtud a nuestras creencias. Luego habrá jueces que limiten el exceso. Pensemos que la Ixquierda que tanto pide ¡LIBERTAD! a lo WILLIAM WALLACE en verdad está deseando prohibir todo cuanto no siga su “corriente de acción”. Y aplasta oposición, como HULK, con las mismas perturbadoras técnicas de un fascismo que pide desaparezca, aunque bien aprovecha sus métodos de coerción, ostracismo, acoso, persecución, represión.

La Humanidad jamás progresará mientras no admita esta brodignaniana hipocresía y, arremangándose, la elimine. Debemos cercenar estos desmanes de la Ixquierda pero YA, porque la (creciente) reacción va a ser harto virulenta y, de veras, no la necesitamos.