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| Afiche. STRUZAN, creo. Pregunta: DANNY MADIGAN entra en la peli,, ¿alterándola? ¿O su aparición estaba prevista en el guión? ¿Qué filme veía, por tanto, el publico? |
De las más reveladoras escenas de esta
ingeniosa película del fantástico (elogiada por la crítica en su momento, cosa
a ¡admirar! ponderando su origen y protagonista) de JOHN MCTIERNAN es la que
JACK SLATER (el combativo estereotipo de policía ácrata que impone su justicia sobre
toda ley) lleva a su impresionable y joven admirador DANIEL MADIGAN a su apartamento:
éste está vacío. El más extremo minimalismo domina un piso cutre junto a la ruidosa
autopista en un día de lluvia… mientras el resto de Los Ángeles luce solano y
lozano. Recalan en el suburbio/vertedero de las fantasías.
Nuestros más admirados iconos están
compuestos de supuestos, sin derecho a intimidad o personalidad. Poseen alma las
criaturas de nuestro ingenio, que no suelen cuestionarse, salvo por imperativo
del guión, su existencia empero. Mas Slater lo hace. Quería ser un buen poli
honrado, aunque acaba enredado en diversos disparates acrobáticos y absurdas devastaciones
enfrentado a una creciente pléyade de asesinos y criminales que permiten bruña
su “ingenio” bajo una frase lapidaria.
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| El ídolo y su admirador incondicional, que acaba siendo un incordio para el mito del celuloide... en uno de sus no más brillantes momentos. Eso, empero, no molesta a Danny |
Slater sin embargo sufre. Y, al hacerlo,
cuestiona todo el abigarrado mundo de armas letales y junglas de cristales, así
como sus mockbusters, que componen
ese deleite de nuestro ocio de sobremesa. Hubo un momento en que estas cintas alcanzaron
su cénit (supongamos que con este título), pero llegó Hong-Kong. Rizando el
rizo, hizo la barrena cada vez más profunda, falsa. No puedes ver JOHN
WICK sin pensar que: o
a posta están exagerando, buscando la comedia negra, o nos toman descaradamente
el pelo, pensando somos tan idiotas como para creer todo eso posible.
Las de John
Wick, al menos la segunda, no pueden ser entendidas de otro modo, porque como pienses
“es en serio”, tienes un problema. La evasión un poco exagerada (cuanto critican
de luminosa forma incisiva, y que empieza a modo en DIRTY HARRY y pone de moda/colofón ARMA LETAL) se desmadra y desborda. Dos tiros no matan a un hombre:
merece un cargador. No sé ya si es un solaz sádico o un esfuerzo por hacerlo
tan excedido que sea imposible aceptarlo como real. La cultura del videojuego,
me temo, influye mucho en esto.
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| El asesino del ojo de cristal. Esto no le impide ver un rauda de posibilidades a sus nuevas y repentinamente adquiridas "facultades" interdimensionales para cometer crímenes |
[Detestaría
darle la razón a esos conservadores latosos que ven una amenaza en los videojuegos, el rock y los TBOs,
en serio; aunque, así planteado… Hum…]
ARNOLD SCHWARZENEGGER hace su mejor papel
en un filme donde ataca su medio de vida. Tiene la suficiente confianza,
solidez y madurez interpretativa como para desafiar los clichés que sabe le han
puesto en órbita (aunque su estela parezca más opaca estos últimos años). Produce
deleite y maravilla ver esta película que está diciendo al aficionado a esos
disparates (yo mismo) que todo posee un fondo de ilógica que hay que meditar.
Las armas deben recargarse, las heridas incapacitan, quien cae de lo alto de
rascacielos sobre los ascensores se parten las rodillas… detalles (imposibles)
así, ¿vale?
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| MAGNETO en un papel igual de espectacular: LA MUERTE. La referencia a READY PLAYER ONE no es caprichosa, pese a la concordancia de temáticas. Uno de los guionistas de esta cinta lo de también de la otra |
Por otra parte, por su profuso aluvión de
referencias cruzadas (CultuPop por un tubo), Last Action Hero debe considerarse un muy digno antepasado de Ready
Player One. En
esencia, van de lo mismo: el enfrentamiento entre la dorada ficción olímpica y
la sórdida-ramplona realidad angulosa hiriente que debes acabar aceptando. Los
sabañones de Danny, Nueva York fría y lluviosa (en contraste con L. A.), yonquis
pestilentes, BENEDICT matando a quien quiere sin que un chorro de policías
aparezca al momento, la noción de que los malos sí ganan aquí, Danny...
Es lo que resume Ready Player One: huyes a OASIS para evitar el lacerante mundo
real. Danny se evade a las fantasías policíacas de Slater (su OASIS) por idéntica
razón. Esto comunica a ambas, detalle a estimar al visionarse, aunque Last Action Hero vino antes. Preparó el
camino a la otra según Slater conducía, cuan SHANE, rumbo al ocaso.
