No se puede hablar de villanos de ficción sin dedicarle un apartado a EL KURGAN |
Es ya tradición por esta fecha anunciar que
Sitio
de Ciencia Ficción me honra al publicar algunos de mis desvaríos sobre
el tema propuesto. Lo contemplo como un atractivo reto, eso que pongan un tema
y busques el cómo hacerlo lo mejor o sugestivo posible, porque la dura competencia
es docta. A veces, la idea/contexto sale del tirón. Otras, debe sufrir un
laaargo proceso de maduración, como sucedió este año.
Estaba complicado esta vez, por la florida
y rica variedad de miradas que el resto de colaboradores invitados al evento iban
a ofrecer. No sé cuántos más se han “tirado” a lo básico, al Villano Por
Excelencia, del cual venden ahora su despiezada maqueta en los quioscos; me
refiero a DARTH VADER. Luego, por tradición, tocaba recurrir a MING EL
DESPIADADO y a KHANG el Trekkie. Imposible soslayar a PALPATINE. Me he
tomado la libertad de incluir en el listado a EL KURGAN, porque, fiereza a punta
de mandoble demostrada aparte, su intención última era dominar el planeta con
aviesas intenciones.
Esa fue la clave que me dio el texto: el
dominio. No en el concepto medieval de imposición por la fuerza, sino de
maneras más sibilinas. Más a lo GRAN HERMANO, ese trampantojo de una siniestra
organización de desconocidos individuos dogmatizados, hasta en su número ignoto,
que mantienen activo un opresivo régimen que destruye a capricho las vidas de cuantos
somete su férula. Preferí más destacar esa faceta del Villano que la violenta usual,
más gráfica e inmediata. Asumido, el resto vino rodado. Helo ahí.
Hay ilustrado material en esas reseñas que recomiendo desde este espacio.